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martes, 5 de mayo de 2020
PANDEMIA Y MANIPULACIÓN POLÍTICA
A medida que las teorías de conspiración sobre COVID-19 se arraigan en los Estados Unidos, la comprensión de los fundamentos psicológicos de las creencias de conspiración es cada vez más crítica. Nuestra investigación muestra que las creencias en dos variantes populares de la teoría de la conspiración COVID-19 son el producto conjunto de las predisposiciones psicológicas 1) para rechazar información proveniente de expertos y otras figuras de autoridad y 2) para ver eventos importantes como producto de conspiraciones, también como motivaciones partidistas e ideológicas. Los fundamentos psicológicos de las creencias de conspiración tienen implicaciones para el desarrollo de estrategias diseñadas para reducir sus consecuencias negativas.
¿Cuán generalizadas son las creencias sobre las teorías de conspiración COVID-19?
¿Qué factores psicológicos, sociales y políticos explican las creencias de conspiración de COVID-19?
¿Pueden el partidismo y las señales de los líderes partidistas, como el presidente, aumentar la información errónea sobre COVID-19?
Usando una encuesta representativa de adultos estadounidenses enviada del 17 al 19 de marzo de 2020, examinamos la prevalencia y las correlaciones de creencias en dos teorías de conspiración sobre COVID-19.
El 29% de los encuestados está de acuerdo en que la amenaza de COVID-19 se ha exagerado para dañar al presidente Trump; El 31% está de acuerdo en que el virus se creó y propagó a propósito.
Los predictores más fuertes de las creencias en estas ideas son una predisposición psicológica para rechazar información experta y relatos de eventos importantes (negación), una predisposición psicológica para ver eventos importantes como producto de teorías de conspiración (pensamiento de conspiración) y motivaciones partidistas e ideológicas.
El apoyo a Donald Trump está fuertemente relacionado con la creencia de que la amenaza COVID-19 se ha exagerado, incluso cuando se tiene en cuenta el partidismo y la ideología. Esta relación es más fuerte entre las personas que regularmente prestan atención a la política. Suponemos que los partidarios de Trump adoptaron esta creencia en respuesta a los primeros mensajes del presidente sobre el virus.
La creencia de que el virus se propagó a propósito está más relacionada con el pensamiento de conspiración y solo está un poco más concentrado entre los republicanos y conservadores autoidentificados que los demócratas y liberales. Esto es probablemente una consecuencia del hecho de que solo unas pocas élites partisanas menos destacadas han respaldado esta teoría.
Trascendencia
Las creencias de conspiración, especialmente las relacionadas con la ciencia, la medicina y los temas relacionados con la salud, están muy extendidas (Oliver y Wood 2014) y son capaces de provocar que las personas eviten comportamientos relacionados con la salud (Jolley y Douglas 2014). Estas (in) acciones pueden resultar en consecuencias sociales negativas que van más allá del creyente de la conspiración individual (por ejemplo, no vacunar a los hijos puede contribuir a un resurgimiento de enfermedades que alguna vez fueron erradicadas). Un paso primario en cualquier iniciativa para corregir creencias dañinas es comprender sus características y fuentes. Si entendemos quién cree en las teorías de conspiración y la información errónea sobre COVID-19 y por qué tienen tales creencias, podemos informar mejor las estrategias para mitigar los efectos nocivos de las creencias.
Encontramos que la predisposición psicológica a rechazar información experta y autorizada (negación), la tendencia a ver los principales eventos sociales y políticos como producto de conspiraciones (pensamiento de conspiración) y las motivaciones partidistas son los factores explicativos más fuertes detrás de las creencias de conspiración COVID-19. Debido a que dos de estos factores, el pensamiento de conspiración y el negacionismo, se basan en una profunda desconfianza de expertos y figuras de autoridad (por ejemplo, científicos, líderes políticos), es probable que se corrijan las creencias mal informadas y conspirativas entre las personas que exhiben altos niveles de pensamiento de conspiración y negación. ser dificil. Es poco probable que los teóricos de la conspiración y los negacionistas simplemente acepten información correctiva proveniente de expertos. Este vínculo entre el pensamiento de conspiración y la información errónea se ha destacado como una razón potencial para el fracaso observado de las estrategias correctivas en varios casos relacionados con la salud (Carey, et al. 2020).
A pesar de esta dificultad, no es del todo imposible limitar los efectos negativos de la desinformación y las teorías de conspiración, especialmente cuando el tercer factor, el partidismo, puede movilizarse en este esfuerzo. Identificamos tres estrategias para superar estos efectos negativos. Primero, podríamos tratar de limitar la propagación o la exposición a la desinformación y las teorías de conspiración en primer lugar, o intentar "pre-literar" las dudosas afirmaciones en el centro de tales ideas. Estas estrategias toman la perspectiva de que nuestros esfuerzos deben centrarse tanto en la prevención como en el tratamiento, y los esfuerzos recientes en este sentido han demostrado ser exitosos a pesar de ser legales y prácticos.
Autores y crédito:
viernes, 24 de abril de 2020
ALEMANIA: GRAN MANEJO DE PANDEMIA
Lo que Alemania acertó en la lucha contra el coronavirus
El país tiene una tasa de mortalidad mucho más baja que sus vecinos europeos y ha comenzado a levantar su bloqueo
Muchos en el Reino Unido miraron con envidia esta semana cuando Alemania comenzó a levantar algunas de sus medidas de bloqueo de coronavirus y las tiendas reabrieron en todo el país. Los concesionarios de automóviles y las tiendas de muebles están de vuelta en el negocio. Incluso los dos zoológicos de Berlín se reabrirán a finales de este mes.
Si bien queda por ver si las autoridades alemanas lo hicieron bien o si actuaron demasiado pronto para aliviar la presión, está claro que el país lo ha hecho mejor que la mayoría de sus vecinos europeos para combatir el virus hasta ahora.
Alemania tiene una de las tasas de mortalidad más bajas del mundo, con 4.869 muertes por 147.593 infecciones detectadas, según la Universidad Johns Hopkins en los Estados Unidos. Esa es una tasa de letalidad de poco más del 3 por ciento, en comparación con alrededor del 13 por ciento en el Reino Unido, Francia e Italia.
Además, los científicos alemanes anunciaron la semana pasada que habían logrado reducir el factor de reproducción (la cantidad de personas a las que cada persona con el virus pasa la infección) por debajo de 1 por primera vez.
Pase lo que pase después, ahora Alemania está tan cerca de una historia de éxito de coronavirus como lo ha sido Europa. La historia de ese éxito se reduce a tres cosas: preparación, un sistema descentralizado que permite a los médicos hacer las llamadas y una generosa suerte.
Camas de cuidados intensivos
Alemania estaba mejor preparada para el coronavirus que cualquier otro lugar en Europa por una razón clave: tenía camas de cuidados intensivos.
Al comienzo del brote, Alemania tenía 28,000 camas en UCI, mucho más que cualquier otro país europeo. El Reino Unido tenía solo 4,000. En relación con el tamaño de su población, Alemania tenía 29.2 camas de cuidados intensivos por cada 100,000 personas, en comparación con 12.5 en Italia, 11.6 en Francia y solo 6.6 en el Reino Unido.
Y desde que comenzó la crisis, Alemania ha aumentado aún más su número total de camas en la UCI, a 40,000, lo que significa que su sistema de salud nunca se ha sobrecargado.
"Una cosa que Alemania hizo bien fue aumentar las camas de cuidados intensivos", dijo el profesor Alexander Kekulé, un destacado epidemiólogo y virólogo alemán. "Como vimos en Italia, es cuando las unidades de cuidados intensivos están llenas que la tasa de mortalidad realmente comienza a aumentar".
Prueba, prueba, prueba
Los científicos del gobierno alemán dicen que la razón por la cual la tasa de mortalidad del país es mucho más baja que en otros países es simplemente porque están detectando más de los casos que no llegan al hospital.
"La razón por la que tenemos tan pocas muertes es porque hacemos muchas pruebas", dijo el profesor Christian Drosten, el virólogo a cargo de la respuesta nacional.
"Prueba, prueba, prueba" ha sido el mantra de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para combatir el virus, y si un país se lo ha tomado en serio es Alemania.
Hasta ahora, Alemania ha realizado más de 1.73 millones de pruebas de coronavirus a una tasa de 350,000 por semana, según Jens Spahn, el ministro de salud.
Los científicos alemanes creen que sus cifras están más cerca de la tasa de mortalidad real del virus, porque están registrando más de los casos en que los pacientes se recuperan.
Persiguiendo las cadenas de infección
Pero las pruebas exhaustivas no solo dan números más confiables. También ha permitido a Alemania detener la propagación del virus al rastrear las cadenas de infección y aislar a las personas antes de que puedan transmitirlo a otros.
El ejemplo clásico es la ciudad de Gangelt en el distrito de Heinsberg, el epicentro del primer gran brote de Alemania.
El 25 de febrero, un residente de la ciudad de 47 años dio positivo por el coronavirus. Él y su esposa fueron puestos inmediatamente en aislamiento. Pero las autoridades alemanas no se detuvieron allí.
En cuestión de días, habían rastreado a todos con los que la pareja podría haber estado en contacto durante las dos semanas anteriores. Esa era mucha gente: la pareja había pasado diez días en celebraciones de carnaval repletas y podría haber transmitido la infección a cientos.
Pero las autoridades de salud pudieron contactar a todos los que habían estado en el carnaval y probarlos. El resultado fue que el brote fue confinado. Heinsberg ha pasado lo peor, y las tiendas del distrito pudieron reabrir esta semana.
Descentralización
Parte de la preparación de Alemania radica en el hecho de que gasta una mayor proporción de su PIB en atención médica que la mayoría de los países: 11.2 por ciento, en comparación con 9.6 por ciento en el Reino Unido.
Pero Estados Unidos gasta aún más y ha luchado por contener el virus. La respuesta está en el sistema descentralizado de salud pública de Alemania.
Es el sistema de salud financiado con fondos públicos más antiguo de Europa, que data de cuando el príncipe Otto von Bismarck era canciller.
Pero a diferencia del Reino Unido, no existe una autoridad central como el NHS. Los hospitales y las clínicas son independientes, y la asistencia sanitaria está financiada por un seguro público obligatorio.
El debate sobre qué sistema es mejor es interminable, pero en este caso la configuración alemana resultó más adecuada para abordar el coronavirus.
Alemania ha recibido pacientes de Covid-19 de regiones muy afectadas en Francia e Italia para su tratamiento en hospitales de todo el país. Hasta ahora, el sistema de atención de salud de Alemania ha originado principalmente la pandemia sin verse abrumado y ha tenido la capacidad adecuada en sus unidades de cuidados intensivos para tratar a pacientes con Covid-19.
Alemania tiene más de 138,000 casos confirmados de infección, de los cuales aproximadamente 66,500 personas se han recuperado y 4,120 han muerto. Y aunque el NHS intentó aumentar la capacidad en un puñado de superlaboratorios centralizados, en Alemania los médicos generales podían enviar muestras a una red de 176 laboratorios públicos y privados de todo el país para su análisis. Los costos fueron fijados y la factura fue cobrada por los fondos públicos de seguros.
"Tenemos una cultura aquí en Alemania que no es compatible con un sistema de diagnóstico centralizado", dijo el profesor Drosten a la radio NPR. "Por lo tanto, Alemania no tiene un laboratorio de salud pública que impida que otros laboratorios realicen las pruebas".
Kits de prueba
Todas esas pruebas dependieron de que Alemania tuviera suficientes kits de prueba para dar la vuelta, y ahí es donde entra nuevamente la preparación. Ayudó que Alemania tenga muchas compañías de biotecnología capaces de producir pruebas de virus, pero también el Reino Unido.
La diferencia, en pocas palabras, es que Alemania actuó más rápido. En enero, antes de que la OMS declarara que el coronavirus era transmisible de una persona a otra, los científicos alemanes habían desarrollado una prueba.
Pudieron actuar tan rápido porque los médicos y académicos trabajaron juntos con el sector privado sin esperar a que el gobierno actuara.
Olfert Landt, un empresario biotecnológico alemán, estableció su compañía TIB Molbiol para trabajar junto con el hospital de enseñanza Charite de Berlín para desarrollar una prueba, y los fondos públicos de seguros acordaron pagar la prueba en febrero.
Como las autoridades alemanas han sido las primeras en reconocer, toda la preparación del mundo no los habría llevado a donde están si no fuera por una suerte crucial desde el principio.
El principal brote del virus se introdujo en Alemania por un camino muy específico: los esquiadores que regresban de las vacaciones de invierno en los centros turísticos de Austria e Italia. Eso significaba que las infecciones iniciales se limitaban a los jóvenes y en forma, que tenían la mejor oportunidad de sobrevivir al virus.
Y eso le dio a Alemania una ventaja vital para comenzar su programa de prueba y seguimiento de las cadenas de infección antes de que pudiera extenderse a los grupos más vulnerables, los mayores de 70 años o con condiciones de salud preexistentes.
El país tiene una tasa de mortalidad mucho más baja que sus vecinos europeos y ha comenzado a levantar su bloqueo
Muchos en el Reino Unido miraron con envidia esta semana cuando Alemania comenzó a levantar algunas de sus medidas de bloqueo de coronavirus y las tiendas reabrieron en todo el país. Los concesionarios de automóviles y las tiendas de muebles están de vuelta en el negocio. Incluso los dos zoológicos de Berlín se reabrirán a finales de este mes.
Si bien queda por ver si las autoridades alemanas lo hicieron bien o si actuaron demasiado pronto para aliviar la presión, está claro que el país lo ha hecho mejor que la mayoría de sus vecinos europeos para combatir el virus hasta ahora.
Alemania tiene una de las tasas de mortalidad más bajas del mundo, con 4.869 muertes por 147.593 infecciones detectadas, según la Universidad Johns Hopkins en los Estados Unidos. Esa es una tasa de letalidad de poco más del 3 por ciento, en comparación con alrededor del 13 por ciento en el Reino Unido, Francia e Italia.
Además, los científicos alemanes anunciaron la semana pasada que habían logrado reducir el factor de reproducción (la cantidad de personas a las que cada persona con el virus pasa la infección) por debajo de 1 por primera vez.
Pase lo que pase después, ahora Alemania está tan cerca de una historia de éxito de coronavirus como lo ha sido Europa. La historia de ese éxito se reduce a tres cosas: preparación, un sistema descentralizado que permite a los médicos hacer las llamadas y una generosa suerte.
Camas de cuidados intensivos
Alemania estaba mejor preparada para el coronavirus que cualquier otro lugar en Europa por una razón clave: tenía camas de cuidados intensivos.
Al comienzo del brote, Alemania tenía 28,000 camas en UCI, mucho más que cualquier otro país europeo. El Reino Unido tenía solo 4,000. En relación con el tamaño de su población, Alemania tenía 29.2 camas de cuidados intensivos por cada 100,000 personas, en comparación con 12.5 en Italia, 11.6 en Francia y solo 6.6 en el Reino Unido.
Y desde que comenzó la crisis, Alemania ha aumentado aún más su número total de camas en la UCI, a 40,000, lo que significa que su sistema de salud nunca se ha sobrecargado.
"Una cosa que Alemania hizo bien fue aumentar las camas de cuidados intensivos", dijo el profesor Alexander Kekulé, un destacado epidemiólogo y virólogo alemán. "Como vimos en Italia, es cuando las unidades de cuidados intensivos están llenas que la tasa de mortalidad realmente comienza a aumentar".
Prueba, prueba, prueba
Los científicos del gobierno alemán dicen que la razón por la cual la tasa de mortalidad del país es mucho más baja que en otros países es simplemente porque están detectando más de los casos que no llegan al hospital.
"La razón por la que tenemos tan pocas muertes es porque hacemos muchas pruebas", dijo el profesor Christian Drosten, el virólogo a cargo de la respuesta nacional.
"Prueba, prueba, prueba" ha sido el mantra de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para combatir el virus, y si un país se lo ha tomado en serio es Alemania.
Hasta ahora, Alemania ha realizado más de 1.73 millones de pruebas de coronavirus a una tasa de 350,000 por semana, según Jens Spahn, el ministro de salud.
Los científicos alemanes creen que sus cifras están más cerca de la tasa de mortalidad real del virus, porque están registrando más de los casos en que los pacientes se recuperan.
Persiguiendo las cadenas de infección
Pero las pruebas exhaustivas no solo dan números más confiables. También ha permitido a Alemania detener la propagación del virus al rastrear las cadenas de infección y aislar a las personas antes de que puedan transmitirlo a otros.
El ejemplo clásico es la ciudad de Gangelt en el distrito de Heinsberg, el epicentro del primer gran brote de Alemania.
El 25 de febrero, un residente de la ciudad de 47 años dio positivo por el coronavirus. Él y su esposa fueron puestos inmediatamente en aislamiento. Pero las autoridades alemanas no se detuvieron allí.
En cuestión de días, habían rastreado a todos con los que la pareja podría haber estado en contacto durante las dos semanas anteriores. Esa era mucha gente: la pareja había pasado diez días en celebraciones de carnaval repletas y podría haber transmitido la infección a cientos.
Pero las autoridades de salud pudieron contactar a todos los que habían estado en el carnaval y probarlos. El resultado fue que el brote fue confinado. Heinsberg ha pasado lo peor, y las tiendas del distrito pudieron reabrir esta semana.
Descentralización
Parte de la preparación de Alemania radica en el hecho de que gasta una mayor proporción de su PIB en atención médica que la mayoría de los países: 11.2 por ciento, en comparación con 9.6 por ciento en el Reino Unido.
Pero Estados Unidos gasta aún más y ha luchado por contener el virus. La respuesta está en el sistema descentralizado de salud pública de Alemania.
Es el sistema de salud financiado con fondos públicos más antiguo de Europa, que data de cuando el príncipe Otto von Bismarck era canciller.
Pero a diferencia del Reino Unido, no existe una autoridad central como el NHS. Los hospitales y las clínicas son independientes, y la asistencia sanitaria está financiada por un seguro público obligatorio.
El debate sobre qué sistema es mejor es interminable, pero en este caso la configuración alemana resultó más adecuada para abordar el coronavirus.
Alemania ha recibido pacientes de Covid-19 de regiones muy afectadas en Francia e Italia para su tratamiento en hospitales de todo el país. Hasta ahora, el sistema de atención de salud de Alemania ha originado principalmente la pandemia sin verse abrumado y ha tenido la capacidad adecuada en sus unidades de cuidados intensivos para tratar a pacientes con Covid-19.
Alemania tiene más de 138,000 casos confirmados de infección, de los cuales aproximadamente 66,500 personas se han recuperado y 4,120 han muerto. Y aunque el NHS intentó aumentar la capacidad en un puñado de superlaboratorios centralizados, en Alemania los médicos generales podían enviar muestras a una red de 176 laboratorios públicos y privados de todo el país para su análisis. Los costos fueron fijados y la factura fue cobrada por los fondos públicos de seguros.
"Tenemos una cultura aquí en Alemania que no es compatible con un sistema de diagnóstico centralizado", dijo el profesor Drosten a la radio NPR. "Por lo tanto, Alemania no tiene un laboratorio de salud pública que impida que otros laboratorios realicen las pruebas".
Kits de prueba
Todas esas pruebas dependieron de que Alemania tuviera suficientes kits de prueba para dar la vuelta, y ahí es donde entra nuevamente la preparación. Ayudó que Alemania tenga muchas compañías de biotecnología capaces de producir pruebas de virus, pero también el Reino Unido.
La diferencia, en pocas palabras, es que Alemania actuó más rápido. En enero, antes de que la OMS declarara que el coronavirus era transmisible de una persona a otra, los científicos alemanes habían desarrollado una prueba.
Pudieron actuar tan rápido porque los médicos y académicos trabajaron juntos con el sector privado sin esperar a que el gobierno actuara.
Olfert Landt, un empresario biotecnológico alemán, estableció su compañía TIB Molbiol para trabajar junto con el hospital de enseñanza Charite de Berlín para desarrollar una prueba, y los fondos públicos de seguros acordaron pagar la prueba en febrero.
Como las autoridades alemanas han sido las primeras en reconocer, toda la preparación del mundo no los habría llevado a donde están si no fuera por una suerte crucial desde el principio.
El principal brote del virus se introdujo en Alemania por un camino muy específico: los esquiadores que regresban de las vacaciones de invierno en los centros turísticos de Austria e Italia. Eso significaba que las infecciones iniciales se limitaban a los jóvenes y en forma, que tenían la mejor oportunidad de sobrevivir al virus.
Y eso le dio a Alemania una ventaja vital para comenzar su programa de prueba y seguimiento de las cadenas de infección antes de que pudiera extenderse a los grupos más vulnerables, los mayores de 70 años o con condiciones de salud preexistentes.
viernes, 3 de abril de 2020
LA PSICOSIS PANDÉMICA
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Reconocer, reconocer y actuar sobre la angustia mental en estos tiempos inciertos es clave para disminuir el impacto.
¿Cuáles son las implicaciones para la salud mental?
Un conocimiento práctico de las diferentes implicaciones para la salud mental puede ayudarnos a comprender y abordar los riesgos para la salud mental de esta pandemia de salud global. Estos son los posibles síntomas a tener en cuenta.
Ansiedad
Se espera ansiedad relacionada con el coronavirus. Una encuesta de ciudadanos chinos publicada en febrero encontró que el 42.6% de los encuestados experimentaron ansiedad relacionada con el brote de coronavirus.
Una encuesta realizada por la Kaiser Family Foundation encontró que las principales preocupaciones relacionadas con la pandemia de coronavirus fueron:
Usted o alguien de su familia se enfermará
Sus inversiones, como los ahorros para la jubilación o la universidad, se verán afectados negativamente
Perderá ingresos debido al cierre del lugar de trabajo o la reducción de horas
No podrá pagar la prueba o el tratamiento si lo necesita
Correrá el riesgo de exponerse al virus porque no puede permitirse quedarse en casa y faltar al trabajo.
Obsesiones
En una situación como esta, es fácil volverse obsesivo con la prevención de enfermedades, especialmente para aquellos con TOC que ya experimentan obsesiones por contaminación: "preocupación intrusiva no deseada de que uno esté sucio y necesite lavarse, limpiarse o esterilizarse".
Soledad
El distanciamiento social se considera crítico para desacelerar la propagación del coronavirus. Sin embargo, es comprensible que pueda conducir a la soledad. Numerosos estudios han demostrado la salud mental adversa y los impactos físicos de la soledad, incluido el potencial para desencadenar un episodio depresivo.
Estrés traumático
Las personas que han sido puestas en cuarentena también pueden experimentar estrés traumático. Una encuesta de personas sujetas a cuarentena durante el brote de SARS en 2003 encontró que casi el 29% experimentó estrés traumático.
¿Que puedo hacer?
Con la conciencia de estos riesgos para la salud mental, podemos trabajar para hacer frente a esta difícil situación y reducir el impacto potencial en nuestra salud mental. Aquí hay una lista de estrategias de afrontamiento para ayudarlo a superar estos tiempos inciertos, pero se destina a una clase económica media o media alta. Pero trae información de aplicación general.
Tenga en cuenta su consumo de noticias
Las noticias pueden ser útiles al fomentar las precauciones y la prevención, pero leer y observar compulsivamente y obsesivamente sobre el brote puede ser perjudicial para la salud mental. Aquí hay algunas sugerencias que pueden ayudarlo a seguir las noticias mientras protege su salud mental.
Limita tus fuentes
Use solo una o dos fuentes confiables de noticias, ya que la información errónea y los malos informes son rampantes. El reporte del Subsecretario de Salud, Hugo López Gattel, es un gran recurso para actualizaciones y precauciones. También puede seleccionar un medio de noticias que le permita evitar el contenido potencialmente desencadenante. Por ejemplo, al leer un artículo en su teléfono o computadora, puede desplazarse más allá de las fotos inquietantes y llegar rápidamente a la información que le interesa.
Practica la aceptación
Acepte que la cobertura de noticias no responderá todas sus preguntas ni resolverá todas sus preocupaciones. Acepta la incertidumbre. Confíe en que los funcionarios de todo el mundo y la comunidad médica están haciendo todo lo posible para abordar la situación.
Limite el consumo
Establezca una tasa de consumo razonable, que puede estar buscando actualizaciones una o dos veces al día. Consuma solo lo que necesita saber, lo que es más relevante para usted y, en particular, lo que está sucediendo o anticipando en su propia comunidad.
Distinguir entre global y local
El virus no necesariamente tomará el mismo curso en los EE. UU. Que en otros países. Es importante pensar críticamente sobre la información proporcionada y no sacar conclusiones precipitadas.
Pídele ayuda a alguien
Si cree que necesita separarse de las noticias, haga que un amigo o ser querido filtre las noticias por usted y le proporcione actualizaciones basadas en una evaluación razonable de lo que es relevante para usted. Esto le permitirá reducir el consumo directo de noticias.
Haga un plan de interrupción de la salud
La educación puede ser crítica para aliviar el estrés y la ansiedad. Hable con su asesor de atención médica sobre las precauciones de coronavirus específicas para sus necesidades de salud, incluido un plan de interrupción de la salud.
Conozca las medidas preventivas y preventivas de coronavirus de fuentes confiables como los CDC. Haga un plan para las necesidades de su hogar: una lista de compras, una lista de farmacias. También puede ayudar a desarrollar un plan de emergencia, especialmente para los miembros mayores de la familia.
Mantente conectado
Manténgase conectado con amigos y familiares por Skype, Facetime, correo electrónico, mensajería y mensajes de texto, especialmente aquellos que pueden estar aislados. Esté listo para escuchar sus preocupaciones y compartir las suyas. Aprenda habilidades de escucha eficaces para ayudar a sus amigos y seres queridos.
La conexión social es de vital importancia para evitar la soledad y la depresión resultante.
Cuídate
Es esencial que su salud sea una prioridad durante este tiempo. Las actividades críticas de autocuidado son el sueño, el ejercicio físico y una dieta saludable. Encuentre formas de abordar las formas de estrés, como escribir un diario, salir a caminar o llamar a un ser querido. Mantener una sensación de normalidad y rutina también puede reducir el estrés.
Puede ser especialmente útil practicar la atención plena e intentar no pensar en el futuro o en el peor de los casos. Hay muchas referencias en línea, incluidos libros Kindle en Amazon, videos de meditación y yoga guiados por YouTube, y aplicaciones como Headspace.
Encuentra cosas que hacer / distracciones
Las actividades que lo distraen de los eventos actuales pueden ser útiles. Aqui hay algunas ideas:
Las tareas del hogar, como la limpieza de primavera, le darán un sentido de propósito y logro cuando se complete.
Cursos universitarios gratuitos en línea y cursos a través de cousera, como la clase más popular de la Universidad de Yale: La ciencia del bienestar. Ofrecen una gran oportunidad de aprendizaje.
Las películas se trasladan de los cines a las online. Netflix también es una buena opción.
La programación de televisión se ha expandido durante la crisis, particularmente a través de servicios de transmisión como Netflix. Actualmente también puedes transmitir Met Opera de forma gratuita. La NFL y la NBA también ofrecen acceso complementario a plataformas de transmisión en línea.
Las parroquias virtuales, que el Papa y otros líderes religiosos están ofreciendo, pueden ayudar a mantener las conexiones religiosas.
Ayuda a otros
El principio del ayudante muestra que ayudar al prójimo también es un beneficio para el ayudante. En Europa y otras comunidades afectadas, las personas están ayudando a los que se aíslan a sí mismos comprando o haciendo recados para ellos. Canadá ha desarrollado un movimiento llamado "cuidadora".
Las comunidades de ayuda mutua se están desarrollando en varios países y los organizadores en línea han reunido una lista exhaustiva de recursos. Algunos se centran en "los esfuerzos locales para construir redes que puedan responder a nivel de vecindario o comunidad", mientras que otros "construyen redes para servir a más grupos en riesgo, como las personas inmunosuprimidas o comprometidas, encarceladas y los trabajadores que estarán fuera de trabajos." Estos grupos permiten a las personas que necesitan ayuda, solicitarla y contactarlas con quienes pueden brindar ayudar.
En estos tiempos inciertos y sin precedentes, es natural experimentar estrés y ansiedad. Sin embargo, una conciencia de estos factores estresantes nos posiciona mejor para abordarlos. Y hay muchas herramientas y estrategias de afrontamiento disponibles para combatir las tensiones en nuestra salud mental.
Somos criaturas creativas. También somos criaturas sociales. Por lo tanto, estamos encontrando formas de permanecer socialmente conectados mientras nos desconectamos físicamente. Quizás también salgamos de esta crisis con una mejor apreciación y respeto por nuestros semejantes humanos y ciudadanos.
martes, 31 de marzo de 2020
LA PANDEMIA: EL OTRO ENFOQUE
Conrado García Jamin
• Según datos de la Universidad Johns Hopkins, hasta éste día hay más de 845,000 casos y más de 41,000 muertes en todo el mundo.
• Estados Unidos ahora lidera el mundo con más de 175,000 casos confirmados de COVID-19. El número de muertos en Estados Unidos, ahora por encima de 3.400, ha superado el número de personas asesinadas el 11 de septiembre.
• La Casa Blanca proyecta entre 100,000 y 250,000 muertes de estadounidenses. Tres de cada cuatro estadounidenses están ahora bajo algún tipo de bloqueo.
• España registró 849 nuevas muertes, su mayor número diario desde que comenzó la pandemia.
• En el Reino Unido, las muertes por coronavirus aumentaron de 1,415 a 1,808, el mayor aumento de un día hasta ahora.
• Chris Cuomo de CNN anunció el martes que dio positivo por COVID-19.
TERROR EN ESTADOS UNIDOS
A los estadounidenses se les dijo el martes que se prepararan para las "muy dolorosas" semanas por delante, en la pandemia de coronavirus que se proyecta empeoraría y cobraría hasta un cuarto de millón de vidas de nuestros vecinos del norte, ya que las muertes se dispararon en los puntos críticos europeos de España, Francia y Gran Bretaña.
Con más de 42,000 muertos por la enfermedad en todo el mundo, Estados Unidos, donde se encuentra la mayor cantidad de infecciones confirmadas, alcanzó un hito sombrío a medida que su número nacional de muertes superó al de China.
A medida que los hospitales de campaña brotaron en el epicentro de la ciudad de Nueva York, Trump dijo que estaba extendiendo el distanciamiento social y las órdenes de quedarse en casa por otros 30 días.
"Esto va a ser muy doloroso, muy, muy doloroso; dos semanas", dijo el presidente en la Casa Blanca al describir la pandemia como "una plaga".
"Quiero que cada estadounidense esté preparado para los días difíciles que le esperan".
En cuestión de meses, el virus ha infectado a más de 857,000 personas en una crisis que afecta la economía global y transforma la existencia diaria de unos 3.600 millones de personas a las que se les dice que se queden en casa bajo llave.
Las muertes volvieron a dispararse en toda Europa. Si bien hay signos esperanzadores de que la propagación de infecciones se está desacelerando en Italia y España más afectadas, más de 800 murieron durante la noche en ambos países.
Francia registró un día de 499 muertos, mientras que Gran Bretaña informó de 381 muertes por coronavirus.
Pero los miembros de la fuerza especial de coronavirus de Trump ofrecieron un pronóstico sombrío de entre 100,000 y 240,000 muertes en los Estados Unidos en los próximos meses, teniendo en cuenta los esfuerzos de mitigación actuales.
"A pesar de ser un número tan serio, deberíamos estar preparados para ello", dijo Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas de la nación, con Trump a su lado cuando se le preguntó sobre la cifra más baja de 100,000.
Pero Fauci dijo que la mitigación estaba "realmente funcionando" y que las autoridades están haciendo todo lo posible para obtener el número de muertos "significativamente por debajo de eso".
Con hospitales sobrecargados, los encierros se han extendido a pesar de su impacto económico aplastante.
En Bélgica, una niña de 12 años murió en otro preocupante caso de un joven que sucumbió a la enfermedad.
Francia se unió a los EE. UU. Con un aumento de 3.525 muertes, una cifra oficial que incluye solo a aquellos que murieron en el hospital y no a los que perecieron en el hogar o en hogares de ancianos.
- "Necesitamos ayuda ahora" -
La inundación de pacientes ha generado centros de salud en todo el mundo a toda marcha.
Los hospitales de emergencia están apareciendo en los espacios para eventos, mientras el personal médico angustiado toma decisiones sombrías sobre cómo distribuir equipos de protección limitados, camas y respiradores que salvan vidas.
En escenas previamente inimaginables en tiempos de paz, se erigieron alrededor de una docena de carpas blancas para servir como hospital de campaña en el Central Park de Nueva York.
Si bien muchas empresas y escuelas de todo el mundo han pasado al teletrabajo y a la enseñanza a través de plataformas de video, grandes sectores de la fuerza laboral mundial no pueden realizar sus trabajos en línea y ahora carecen de pago y enfrentan un futuro profundamente incierto.
Los bancos de alimentos en la ciudad de Nueva York han visto un gran aumento en los recién llegados que luchan por alimentar a sus familias.
"Es mi primera vez", dijo Lina Alba, una empleada de limpieza en un hotel de Manhattan que cerró hace dos semanas, desde un centro de distribución de alimentos.
"Necesitamos la ayuda ahora. Esto es una locura", dijo Alba, una madre soltera de cinco hijos de 40 años.
Tres cuartas partes de los estadounidenses están ahora bajo algún tipo de restricción, mientras que en la costa de Florida un crucero afectado por coronavirus y su barco hermano están pidiendo un lugar para atracar después de que cuatro pasajeros murieron a bordo.
- El virus genera divisiones -
La extraordinaria agitación económica y política provocada por el virus está abriendo nuevos frentes tanto para la cooperación como para resolver el conflicto.
En conversaciones virtuales el martes, los ministros de finanzas y los banqueros centrales de las 20 principales economías del mundo se comprometieron a abordar la carga de la deuda de los países de bajos ingresos y entregar ayuda a los mercados emergentes.
La semana pasada, los líderes del G20 dijeron que estaban inyectando $ 5 mil millones en la economía global para evitar una profunda recesión.
En la Unión Europea, sin embargo, las líneas de batalla se han trazado sobre los términos de un plan de rescate.
Italia y España, las más afectadas, están impulsando un instrumento de deuda compartida, denominado "coronabonos".
Pero hablar de deuda compartida es una línea roja para Alemania y otros países del norte, que amenaza con dividir el bloque.
La jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, también advirtió contra el uso de medidas de emergencia como pretexto para tomar el poder, después de que una nueva ley otorgó al líder nacionalista de Hungría, Viktor Orban, autoridad para gobernar por decreto hasta que su gobierno considere que la crisis ha terminado.
• Según datos de la Universidad Johns Hopkins, hasta éste día hay más de 845,000 casos y más de 41,000 muertes en todo el mundo.
• Estados Unidos ahora lidera el mundo con más de 175,000 casos confirmados de COVID-19. El número de muertos en Estados Unidos, ahora por encima de 3.400, ha superado el número de personas asesinadas el 11 de septiembre.
• La Casa Blanca proyecta entre 100,000 y 250,000 muertes de estadounidenses. Tres de cada cuatro estadounidenses están ahora bajo algún tipo de bloqueo.
• España registró 849 nuevas muertes, su mayor número diario desde que comenzó la pandemia.
• En el Reino Unido, las muertes por coronavirus aumentaron de 1,415 a 1,808, el mayor aumento de un día hasta ahora.
• Chris Cuomo de CNN anunció el martes que dio positivo por COVID-19.
TERROR EN ESTADOS UNIDOS
A los estadounidenses se les dijo el martes que se prepararan para las "muy dolorosas" semanas por delante, en la pandemia de coronavirus que se proyecta empeoraría y cobraría hasta un cuarto de millón de vidas de nuestros vecinos del norte, ya que las muertes se dispararon en los puntos críticos europeos de España, Francia y Gran Bretaña.
Con más de 42,000 muertos por la enfermedad en todo el mundo, Estados Unidos, donde se encuentra la mayor cantidad de infecciones confirmadas, alcanzó un hito sombrío a medida que su número nacional de muertes superó al de China.
A medida que los hospitales de campaña brotaron en el epicentro de la ciudad de Nueva York, Trump dijo que estaba extendiendo el distanciamiento social y las órdenes de quedarse en casa por otros 30 días.
"Esto va a ser muy doloroso, muy, muy doloroso; dos semanas", dijo el presidente en la Casa Blanca al describir la pandemia como "una plaga".
"Quiero que cada estadounidense esté preparado para los días difíciles que le esperan".
En cuestión de meses, el virus ha infectado a más de 857,000 personas en una crisis que afecta la economía global y transforma la existencia diaria de unos 3.600 millones de personas a las que se les dice que se queden en casa bajo llave.
Las muertes volvieron a dispararse en toda Europa. Si bien hay signos esperanzadores de que la propagación de infecciones se está desacelerando en Italia y España más afectadas, más de 800 murieron durante la noche en ambos países.
Francia registró un día de 499 muertos, mientras que Gran Bretaña informó de 381 muertes por coronavirus.
Pero los miembros de la fuerza especial de coronavirus de Trump ofrecieron un pronóstico sombrío de entre 100,000 y 240,000 muertes en los Estados Unidos en los próximos meses, teniendo en cuenta los esfuerzos de mitigación actuales.
"A pesar de ser un número tan serio, deberíamos estar preparados para ello", dijo Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas de la nación, con Trump a su lado cuando se le preguntó sobre la cifra más baja de 100,000.
Pero Fauci dijo que la mitigación estaba "realmente funcionando" y que las autoridades están haciendo todo lo posible para obtener el número de muertos "significativamente por debajo de eso".
Con hospitales sobrecargados, los encierros se han extendido a pesar de su impacto económico aplastante.
En Bélgica, una niña de 12 años murió en otro preocupante caso de un joven que sucumbió a la enfermedad.
Francia se unió a los EE. UU. Con un aumento de 3.525 muertes, una cifra oficial que incluye solo a aquellos que murieron en el hospital y no a los que perecieron en el hogar o en hogares de ancianos.
- "Necesitamos ayuda ahora" -
La inundación de pacientes ha generado centros de salud en todo el mundo a toda marcha.
Los hospitales de emergencia están apareciendo en los espacios para eventos, mientras el personal médico angustiado toma decisiones sombrías sobre cómo distribuir equipos de protección limitados, camas y respiradores que salvan vidas.
En escenas previamente inimaginables en tiempos de paz, se erigieron alrededor de una docena de carpas blancas para servir como hospital de campaña en el Central Park de Nueva York.
Si bien muchas empresas y escuelas de todo el mundo han pasado al teletrabajo y a la enseñanza a través de plataformas de video, grandes sectores de la fuerza laboral mundial no pueden realizar sus trabajos en línea y ahora carecen de pago y enfrentan un futuro profundamente incierto.
Los bancos de alimentos en la ciudad de Nueva York han visto un gran aumento en los recién llegados que luchan por alimentar a sus familias.
"Es mi primera vez", dijo Lina Alba, una empleada de limpieza en un hotel de Manhattan que cerró hace dos semanas, desde un centro de distribución de alimentos.
"Necesitamos la ayuda ahora. Esto es una locura", dijo Alba, una madre soltera de cinco hijos de 40 años.
Tres cuartas partes de los estadounidenses están ahora bajo algún tipo de restricción, mientras que en la costa de Florida un crucero afectado por coronavirus y su barco hermano están pidiendo un lugar para atracar después de que cuatro pasajeros murieron a bordo.
- El virus genera divisiones -
La extraordinaria agitación económica y política provocada por el virus está abriendo nuevos frentes tanto para la cooperación como para resolver el conflicto.
En conversaciones virtuales el martes, los ministros de finanzas y los banqueros centrales de las 20 principales economías del mundo se comprometieron a abordar la carga de la deuda de los países de bajos ingresos y entregar ayuda a los mercados emergentes.
La semana pasada, los líderes del G20 dijeron que estaban inyectando $ 5 mil millones en la economía global para evitar una profunda recesión.
En la Unión Europea, sin embargo, las líneas de batalla se han trazado sobre los términos de un plan de rescate.
Italia y España, las más afectadas, están impulsando un instrumento de deuda compartida, denominado "coronabonos".
Pero hablar de deuda compartida es una línea roja para Alemania y otros países del norte, que amenaza con dividir el bloque.
La jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, también advirtió contra el uso de medidas de emergencia como pretexto para tomar el poder, después de que una nueva ley otorgó al líder nacionalista de Hungría, Viktor Orban, autoridad para gobernar por decreto hasta que su gobierno considere que la crisis ha terminado.
- 'Nada para comer' -
El dolor económico de los encierros en casa, es especialmente agudo en el mundo en desarrollo.
En Túnez, varios cientos protestaron por un encierro de una semana que ha impactado desproporcionadamente a los pobres.
"¡No importa el coronavirus, vamos a morir de todos modos! ¡Déjennos trabajar!" gritó un manifestante en la manifestación en las afueras de la capital, Túnez.
Lagos, la ciudad más grande de África, entró en su primer día completo de un cierre de dos semanas: la contención será especialmente difícil en los barrios marginales llenos de la megaciudad, donde muchos dependen de los salarios diarios para sobrevivir.
"No hay dinero para los ciudadanos", dijo el ingeniero Ogun Nubi Victor, de 60 años.
"La gente está sentada en casa, sin nada para comer".
Mientras que gran parte del mundo se cierra, la ciudad china de Wuhan, zona cero, ha comenzado a despertar en los últimos días, dando a los afligidos la primera oportunidad en meses de enterrar a sus muertos.
La crisis del coronavirus está afectando la economía global y transformando la existencia diaria de unos 3.600 millones de personas.
Los voluntarios establecieron un hospital de campaña de emergencia en el Central Park de Nueva York
Si bien la crisis se profundiza en gran parte del mundo, algunos en China están volviendo a la normalidad.
El virus se ha cobrado más de 40,000 vidas en todo el mundo.
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