EL "AGUATOCHE DE LA GENTE"

-En el Aguatoche, el gobernador Sandoval, habría invertido de 4 a 5 millones de dólares, en rancho de un exgobernador de Coahuila.

…Un paraíso rural digno de jeques, existe a 30 kilómetros de Saltillo. Un rancho ubicado al sur de la capital, (colindante con el Ejido La Hedionda): con un vasto manto friático en el subsuelo, cientos de hectáreas cultivables. Equipamiento suntuario (bodegas, naves, silos, graneros, cercas eléctricas, maquinaria pesada, camionetas del año, casa principal totalmente equipada, iglesia, casas de vaqueros, equipos hidráulicos y tubería en exceso), mucho ganado de raza pura, caballerizas de lujo y caballos pura sangre. El acceso, totalmente pavimentado, incluso kilómetros dentro de la zona rural.

El Director de Carrier, un empresario regio llamado Fernando Elizondo Garza, puede dar fe de que su rancho y razón social: “El Aguatoche SA de CV”, fue pactado en señal de compra-venta con un productor de papa de Saltillo, en un millón y medio de dólares. Trato que no llegó a concretarse por un dinero “rápido y furioso” de un exgobernador de Coahuila y su familia en el poder (2 millones de dólares, sin pestañear). Luego, vino el equipamiento del sitio, proyectando su valor. (“Programas, carreteras, y la MegaDeuda de la Gente, “tuvieron buen fin”). Empujando que el valor de la precariedad (ahora de Los Moreira) se re valorara.

Poco tiempo después, otro gobernador apareció en escena. Roberto Sandoval Castañeda, quien llegó al poder en Nayarit, en septiembre del 2011; cuando el bailador, era presidente del CEN del PRI, (4 de marzo a 2 de diciembre del 2011). Y adivinen amigos, ¿cuál fue el lema de gobierno de Roberto Sandoval en Nayarit…?: “El Gobierno de la Gente”. Una influencia total y mucha relación de negocios, se dio y da, entre el imitador del profe, el otro gober de la gente.

Un agrónomo con estudios truncos (Roberto Sandoval) y un profesor corrido de la Normal y “recibido” en la escuela de educación física de Parras (Humberto Moreira); se hicieron socios, ganaderos y gananciosos. Con supuesto “dinero de la gente”, equiparon el rancho El Aguatoche, como pocos en el país. (El gobernador Sandoval, habría dado al bailador de 4 a 5 millones de dólares, solo por su parte en el negocio).

Apareció un personaje extraño, quería contratistas de todo giro, para unos trabajos en zonas rurales cercanas a Saltillo; pagaba en efectivo y sin chistar, eso decía a los proveedores. (Luego se supo que viajó por tierra, en ruta obligada, de Tepic a Saltillo). Con él, un ayudante (con una mariconera en mano, donde guardaba un arma corta y fajos de billetes, de 1000 y de 500). Al tiempo se sabría que el tipo prieto y mal encachado, apodado “El Yogui”, era el titular de obras públicas en el gobierno de Nayarit (antes fue el titular de la comisión estatal del agua).

Un contratista, y su testimonio (Agosto 2016). “Un interfecto que de buenas a primeras me metió en el centro de uno de los más ominosos robos de un gobierno corrupto. Cotizar la construcción de unas caballerizas y el arreglo de varias edificaciones en un rancho sobre la carretera a Zacatecas. Se presenta un hombre con un marcado acento entre costeño y jalisciense. En el vehículo hay otras dos personas, a mi lado está un hombre sosteniendo un pequeño porta documentos hinchado y frente a él una dama. Una carretera recién construida, los carteles que anuncian la inversión conjunta entre la federación y el estado, después de 20 km, un amplio camino revestido. Un portón de herrería franqueado por unos altos muretes de piedra, un camino recto que parece interminable”.

“Entre la entrada y la montaña se observan miles de vacas oscuras, becerros y toros, el Yogui decide que es necesario usar otra puerta y me pregunta ¿Conoces la Hedionda?. Platica que ese rancho era del Gobernador de Nayarit, que comúnmente asistía a su rancho con amigos como el anterior gobernador de Coahuila, que era propiedad de Moreira, pero como son buenos cuates se lo vendió para criar sus vaquitas Angus, que tenía algunos miles de ellas y que todas eran de registro traídas desde Australia (en barco hasta Manzanillo), que necesitaban un lugar como ese con cerca de 800 hectáreas y capacidad de extracción de agua del subsuelo hasta por 300 LPS”.

“Mejorar las condiciones de las casas de los vaqueros, ligarlas con pavimento de concreto y empedrados. Una de docenas de camionetas recién compradas, se estacionó frente a nosotros y bajó un hombre al que Yogui se refería jocosamente con un marcado acento peninsular, entonces observé que todo el personal del rancho era de origen español, ingenieros hidráulicos, vaqueros y hasta caballerangos hablan con estribillo castellano. Me llevan a una bodega de más de 50 metros de larga, donde pretendía que se montaran caballerizas de primer mundo, me mostró algunos de los caballos pura sangre y sin atajos me comentó que costaban algunos cientos de miles de dólares”.

“En la bodega, tubos de aluminio desde el piso hasta los techos que tenían 5 metros de alto. Me cuenta que eran para un proyecto hidráulico que no se pudo hacer para llevar el agua a Saltillo, y que entonces Moreira se los habían regalado al comprar la propiedad. Al lado de otra bodega, encontramos una casa y una capilla de adobe, tenían muebles todavía emplayados en plástico, con problemas estructurales. Climatizar la casa con minisplits y proyectar una terraza, una cocina exterior, una cancha de fútbol y un espacio para estacionamiento también empedrado. Un anticipo del 80% y al alcanzar un avance liquidarían la obra total”.

PROCESO y medios de Chihuahua y Nayarit, han publicado reseñas de negocios similares en Chihuahua y otras entidades, por los mismos personajes: Los Moreira, los Sandoval, y sus familiares.

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Armando Guadiana Tijerina, empresario ganadero, dijo que en el rancho conocido como Aguatoche, en los límites de Coahuila y Nuevo León, se recibieron más de 3 mil vaquillas procedentes de Australia, que no pasaron por el control sanitario oficial.

Señaló que este rancho se presume es de la familia Moreira.

De acuerdo al empresario, originalmente eran 6 mil vaquillas las que arribaron al puerto de Manzanillo, la mitad fue trasladada a Nayarit y otro tanto a Coahuila.

De visita en Torreón, Guadiana dijo que la Asociación Ganadera de Saltillo no tiene registro de esta situación, a pesar de que fueron alrededor de 50 tráileres los que transportaron a las vaquillas, que se desconoce su documentación sanitaria, a pesar de que tuvieron que pasar por varios estados para llegar a su destino en Aguatoche.

"Los permisos de traslado de un estado a otro son importantísimos para proteger la sanidad animal de los demás hatos".