Mayté Parro / Vanguardia
MONCLOVA, COAH.- Aunque la Fiscalía General del Estado no ha hecho comparecer al elemento de la Policía Federal Preventivo que privó ilegalmente de la libertad, torturó, golpeó y videograbó a un menor de 13 años de edad, reveló que el delito por el que fue demandado no es grave y que no se le puede arraigar porque no se dio la flagrancia del delito.
Marisela Narro, delegada regional de la Fiscalía General del Estado en el centro de Coahuila, dijo que no existe complacencia de ésta dependencia para con el policía de la PFP, ya que si no se le ha citado a declarar es porque está en coordinación con sus superiores para reunir todas las pruebas de los hechos.
“Estamos integrando la averiguación, recabando la declaración ministerial, pero es una de tantas diligencias que la fiscalía integra y luego presentarle los elementos de acusación”, insistió.
Narro declaró que la trascendencia del caso se obtiene a partir de que se trata de un servidores público y precisamente porque se trata de una persona encargada de la seguridad de la sociedad, es que se le pone más atención a que se de atención al menor con prontitud y apegada a derecho, sin embargo, omitió la identidad del PFP argumentando que no la tenía a la mano.
“El hecho de que grabó la tortura del niño hace más grave el acontecimiento ante la sociedad, pero no el delito, porque dentro de lo que marca el catálogo de delitos graves que contempla el código de delito penal, es agravada por que él es policía, pero no es grave".
Asumió que la pena que podría alcanzar no se sabe ya que se analiza qué acción es el delito más grave, ya que lo esposó, se lo llevó a su casa donde lo encerró por una hora, lo torturó, lo golpeó y lo videograbó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario