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martes, 20 de agosto de 2019

HUYENDO: AUTOR DE CAMPAÑA NEGRA VS AMLO

Ciudad de México, 14 de marzo (SinEmbargo).– Alejandro Jesús Quintero Iñiguez, señalado por el Gobierno federal de ser uno de los operadores de la red de empresas que financiaron la campaña negra en contra del Presidente Andrés Manuel López Obrador durante el proceso electoral 2017-2018, es un publicista que trabajó muchos años para Televisa y es el creador del plan que llevó a Enrique Peña Nieto a la Presidencia.
El titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, denunció este jueves que en esa red de empresas estaban OHL México (hoy Aleática), Piña Digital, Bufete de Proyectos Información y Análisis, y Conaxis, ésta última recibió dinero por parte del Consejo Mexicano de Negocios (CMN) al inicio del proceso electoral.
El jefe de la Unidad de Inteligencia Financiera precisó que en esta red se identificó al empresario Alejandro Jesús Quintero Iñiguez y a Piña Digital como los receptores de recursos de diversas empresas, e incluso del Gobierno del Estado de México, para realizar la serie “Populismo en América”.
No es la primera vez que el nombre de Alejandro Jesús Quintero Iñiguez está implicado en operaciones para favorecer a políticos y perjudicar a López Obrador, incluso el mismo tabasqueño lo acusó en la campaña de 2018 de estar detrás de esta serie.
Quintero Iñiguez no es ningún improvisado en campañas publicitarias y lleva al menos 20 años trabajando en la industria de la mercadotecnia. Inició su trayectoria en empresas como Colgate-Palmolive, pero su carrera la consolidó cuando entró a Televisa, en 1998.
Su relación con la televisora, sin embargo, comenzó mucho antes por razones personales, su padre trabajó 30 años con Emilio Azcárraga Milmo en el área de ventas y de negocios, pues su compañía de promociones y Below The Line TV Promo compraba y contrataba servicios de Televisa.
Alejandro Jesús Quintero Iñiguez trabajó muchos años para Televisa. Foto: produ.com
De acuerdo con un perfil publicado por la empresa Produ, fue Emilio Azcárraga Jean, quien al asumir el timón de Televisa, lo invitó a unirse a la corporación para reestructurar el área comercial.
Como Vicepresidencia de Ventas y Mercadotecnia de Grupo Televisa, Quintero Iñiguez planeó convertir a los políticos y gobernadores en “paquetes comerciales” que se podían vender en la pantalla, a través de los noticieros y programas de espectáculos, según consignó el periodista Jenaro Villamil en un reportaje publicado en la revista Proceso en octubre de 2005.
El semanario publicó una copia del Plan de Acción que TV Promo, empresa de Alejandro Quintero, propuso a Enrique Peña Nieto para su primer año de gobierno en el Estado de México.
“Quintero sugirió a Peña que, para enfrentar el escándalo de corrupción de su antecesor Arturo Montiel, firmara un plan por 742 millones de pesos, de los que 691 millones se destinarían a publicidad televisiva, incluyendo infomerciales, asesoría en materia política y de comunicación”, describió Proceso en 2005.
Televisa y los gobiernos involucrados en los planes ideados por Alejandro Quintero negaron que negociaran millonarias cantidades del presupuesto público para acceder a la pantalla de los canales de la televisora, sin embargo, en junio de 2012 el diario británico The Guardian publicó un reportaje que revelaba que  la empresa de Emilio Azcárraga puso en marcha una unidad secreta para impulsar el triunfo de Enrique Peña Nieto, entonces candidato del PRI.
De acuerdo con la revista Proceso, al interior de Televisa atribuyeron a Quintero el ser el “filtrador” de esta información. “En ese momento, el estratega comercial mantuvo una fuerte tensión con Bernardo Gómez, el poderoso ‘número dos’ de Televisa, al que se atribuye la actual decisión de relevos”.
Quintero Iñiguez ocupó el cargo de Vicepresidente de Ventas y Mercadotecnia de Grupo Televisa hasta enero de 2015, cuando fue relevado por Ricardo Pérez Teuffer en el marco de una reestructuración en los altos mandos de la televisora.
De acuerdo con un comunicado de la empresa difundido el 30 de enero de 2015, “esta reestructuración se debe a la necesidad de un cambio radical producido por la llegada de la internet a la TV. También se espera reforzar la producción y distribución de contenidos internacionalmente”.
Al dejar la vicepresidencia, Quintero se convirtió en asesor de José Bastón, quien en 2015 era presidente de Televisión y Contenidos de la empresa. En enero de 2019 Bastón salió oficialmente de la Televisa al dejar el Consejo de Administración de Televisa “por motivos personales”.
Alejandro Quintero se desempeñó como publicista del ex Presidente Enrique Peña Nieto en el año 2016. Su objetivo era mejorar la imagen del priista. Actualmente es accionista de TV Promo SA de CV y Grupo TV Promo SA de CV.
El nombre de Quintero volvió a salir a la luz pública el 26 de junio del año pasado, a poco menos de un mes de las elecciones presidenciales. Andrés Manuel López Obrador, entonces candidato por la coalición “Juntos Haremos Historia”, acusó al publicista de estar detrás de la serie “Populismo en América Latina”, que tras meses de expectación se estrenó en la plataforma de Prime Video.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, el tabasqueño aseguró que la serie costó 100 millones de pesos y también acusó a Quintero de ser empleado del Presidente Enrique Peña Nieto y Carlos Salinas de Gortari.
La serie del populismo en contra nuestra será exhibida por Amazon. Costó 100 millones de pesos y daban 100 mas para difundirla. Aquí las televisoras no se prestaron a la guerra sucia. Es obra de Alejandro Quintero, empleado de Carlos Salinas y EPN. Si necesitas un Tafil, llégale
12 mil personas están hablando de esto
Durante la campaña presidencial, camiones con la imagen de Andrés Manuel López Obrador y de Hugo Chávez circularon por la Ciudad de México para anunciar la serie documental que contendría un capítulo sobre el morenista y Hugo Chávez.
La difusión de la producción provocó críticas y una fuerte polémica porque aún sin tener garantizado que sería transmitida en algún canal, los productores pagaron camiones en los que se exhibía López Obrador junto a otros ex presidentes.
Quintero Iñiguez lleva al menos 20 años trabajando en la industria de la mercadotecnia. Inició su trayectoria en empresas como Colgate-Palmolive, pero su carrera la consolidó cuando entró a Televisa, en 1998. Foto: produ.com
LA INVESTIGACIÓN
La investigación que lleva a cabo la Secretaría de Hacienda, a través de la Unidad de Inteligencia Financiera, identificó a “La División” como la realizadora del documental, misma que pertenece a la empresa Piña Digital.
Piña Digital tiene como accionista a Javier García Mata, quien además es el productor del documental.
El informe de Hacienda también destaca a otras empresas implicadas, como Conaxis, que recibió del Consejo Mexicano de Negocios recursos por 96.9 millones de pesos de julio a septiembre de 2017, al inicio del proceso electoral.
A su vez, Conaxis envió a Piña Digital 18.5 millones de pesos y 34 millones de pesos a favor de Martha Matilde Mejía Montes, intermediaria para remitir a Alejandro Jesus Quintero Íñiguez la cantidad de 418 mil dólares.
Además, Bufete de Proyectos Información y Análisis envió 47.9 millones de pesos entre abril y julio 2017 a Grupo TV Promo, empresa de Alejandro Quintero Íñiguez.
La Secretaría de Hacienda identifica a Alejandro Quintero como accionista de TV Promo SA de CV y Grupo TV Promo SA de CV. Esta ultima fue vinculada con la empresa Bufete de Proyectos Información y Análisis, indicada por el sistema financiero como una presunta empresa fachada, así como parte de una red de empresas relacionadas a un esquema de desvío de recursos públicos para favorecer campañas políticas.
De acuerdo con Hacienda, a través de los vínculos de investigación se cuenta con información de una supuesta factura de casi 8 millones de pesos que demuestra el vínculo entre Grupo TV Promo y Piña Digital, en julio de 2017.
También se identificaron dos empresas en las que Alejandro Quintero figura como accionista junto a sus hermanos Germán Arturo Quintero Íñiguez, Carlos Quintero Íñiguez, David Alfonso Quintero Íñiguez, María Elena Quintero Íñiguez, Adriana Guadalupe Quintero Íñiguez.
Los documentos de Hacienda donde se implica a Alejandro Quintero. Foto: SHCP.
Las empresas son Grupo TV Promo y TV Promo, relacionadas como entidades partícipes de la campaña negativa en contra del Presidente Andrés Manuel Lopez Obrador durante 2017 y 2018.

Alejandro Jesús Quintero Iñiguez fue apoderado legal de Telepersonal, empresa resultante de la fusión de Radar Comunicación y Mercadotecnia SA de CV y Radar Servicios y Especializados de Mercadotecnia, la primera es una empresa relacionada con la creación de spots y mensajes presidenciales del anterior Gobierno federal y la segunda mencionada en nota periodística como la partícipe de una campaña a favor de Enrique Peña Nieto.

martes, 3 de julio de 2012

El miedo necesario


Denise Dresser / Proceso
forum@forumenlinea.com
El odio a primera vista. El temor destilado. La mezcla de ambos sentimientos en la campaña del PAN contra Andrés Manuel López Obrador. Día tras día, spot tras spot, declaración tras declaración, los panistas atizan dos sentimientos que van de la mano. Porque no hay odio sin miedo. Porque el odio es el miedo cristalizado, objetivizado, su dividendo: odiamos lo que tememos y el odio florece donde el miedo acecha. El PAN promueve el miedo a un candidato y piensa que tiene derecho a hacerlo por lo que dice y ha hecho. Pero eso es sólo parcialmente cierto. El miedo a AMLO que los panistas siembran y ciertos sectores del país cosechan es en el fondo miedo al país.
Miedo a ese país de pobres, de “nacos”, de indígenas, de desarrapados. Miedo a quienes viven parados en los camellones vendiendo chicles o subsisten en el campo cultivando maíz. Miedo a los mineros enojados y a los cañeros sublevados. Miedo a los resentidos y a los marginados. Miedo a mirar la realidad del subdesarrollo detrás de la retórica de la modernidad. Miedo a la verdad y a nosotros mismos. Miedo a mirar al país tal y como es. Detrás de los mitos. Detrás de las cercas electrificadas cada vez más altas en Las Lomas. Detrás de la hipocresía fundacional en un país profunda y dolorosamente desigual.
Ese miedo al México que hemos construido, disfrazado de rechazo a una persona a la cual se erige como el anti Cristo. “Un peligro para México”. En todas las conversaciones, en todos los cocteles, en todas las cenas. Mensajes reiterativos repletos de descalificaciones enviados a través del internet sobre AMLO. Ignorante. Autoritario. Deshonesto. Cobarde. Demagogo. Violento.  Anti institucional. Mentiroso. Tiene personalidad múltiple. A un compañero lo golpeó cuando le daba la espalda con una pelota de beisbol (después murió). Junto con Hugo Chávez y Fidel Castro creará una América comunista. Aborrece a la gente con dinero. Mató a su hermano. En realidad usa relojes caros y trajes Hugo Boss. Es un naco. Sólo gobernará para los pobres. Su única forma de expresarse es a través de expresiones coloquiales. Una tras otra, preocupaciones legítimas acompañadas de juicios que no lo son.
Una tras otra, percepciones fundadas acompañadas de prejuicios escondidos. Porque como lo escribió Burke, ninguna pasión roba a la mente de sus poderes de actuación y razonamiento como el miedo. Ese miedo que desquicia, que enardece, que polariza. Ese miedo que el PAN detecta y comercializa en las pantallas de televisión. Ese miedo que impide evaluar a López Obrador con la cabeza fría y el corazón en calma. Que obstaculiza la critica necesaria basada en los hechos y no en las diatribas. Que impide ver lo bueno y lo malo de su gestión en el Distrito Federal. Lo positivo y lo negativo de su proyecto alternativo de nación. Lo aplaudible y lo criticable de las propuestas que ha planteado.
Esa labor de discernimiento que una ciudadanía consciente debería asumir como obligación, frente a López Obrador y también frente a sus contrincantes. Esa tarea de externar las preocupaciones legítimas en torno a los derechos de propiedad, la irresponsabilidad fiscal, el alivio a la pobreza acompañado de la creación de riqueza. Esa tarea que hoy quienes odian con virulencia no pueden llevar a cabo. Están demasiado ocupados odiando, vociferando, vituperando. Odiando, quizás, por un sentido de culpa. Temiendo, quizás, porque viven con la conciencia intranquila. Porque cuando se odia tanto a una persona se está odiando algo que es demasiado profundo y poderoso para ser asumido de manera consciente. Porque cuando se odia tanto a una persona, se está odiando también parte de uno mismo, como escribió Herman Hesse en Demian. Lo que no forma parte de una persona no preocupa, pero López Obrador preocupa precisamente por lo que revela de México y su población.
Por ese espejo que coloca ante los ojos del país y quienes han permitido que sea como es hoy. Un lugar rico con muchos pobres. Un lugar con más multimillonarios que Suiza, según la lista más reciente de la revista Forbes. Donde gran parte de las fortunas han sido acumuladas en sectores con poca o ninguna competencia y protegidos por el gobierno. Donde funcionarios de Telmex están intentando bloquear la aprobación de la nueva ley competencia porque buscaría precisamente fomentarla. Donde según un estudio reciente de la ONG Fundar, siete de cada 10 mexicanos padecen un abuso de autoridad cada vez que pisan un Ministerio Público. Donde el 94 por ciento de los delitos no son resueltos. Donde el 40 por ciento de las mujeres dicen haber padecido la violencia doméstica. Donde los responsables del Pemexgate son premiados con una senaduría. Donde 17 millones de personas viven en pobreza extrema. Datos duros de un país donde la vida es difícil para la mayoría de quienes sobreviven en él.
Eso es lo que debería provocar miedo. Eso es lo que debería producir temor. Eso es lo que los mexicanos deberían combatir y cuestionar y odiar y recordarle a los candidatos presidenciales, todos los días a toda hora. Y eso es lo que explica que Andrés Manuel López Obrador sea puntero con posibilidades reales de ganar, aunque no tenga la mejor propuesta para gobernar. Hay demasiados mexicanos para los cuales el país no funciona. Hay demasiados mexicanos para quienes más de lo mismo significaría peor de lo mismo. Hay demasiados mexicanos que buscan una transformación a fondo del país que los ha excluido o maltratado o ignorado. Y también hay demasiados mexicanos que no lo entienden, para los cuales el país marcha. El país avanza. El país les permite vivir bien, aunque sea detrás de muros cada vez más elevados. Aunque sea con miedo.
Por eso el mismo líder que es carismático para los desposeídos cuya salvación está en el cambio es peligroso a los ojos de quienes no ven en el cambio la respuesta, sino la ruina. La esperanza de unos es el miedo de otros. Y el miedo es un garrote usado, a lo largo de la historia, por los sacerdotes y los reyes y los presidentes y los candidatos para evitar que la gente recobre bienes robados.
Bienes públicos que han sido privatizados, monopolizados, arrebatados. ¿Qué es y ha sido más peligroso para México? ¿López Obrador o un sistema socioeconómico que concentra la riqueza y no quiere distribuirla de manera más justa? ¿López Obrador o élites políticas, sociales y empresariales satisfechas con las tajadas que se sirven? El odio feroz a AMLO ata a sus críticos a un adversario falso. El verdadero peligro para México no es un hombre, sino la resistencia de tantos a compartir el país y gobernarlo mejor.

martes, 26 de junio de 2012

Unidad secreta de Televisa promocionó al candidato del PRI

Según unos documentos vistos por the Guardian, la cadena de medios encargó videos para desacreditar a los rivales del candidato, para ganar la carrera por la Presidencia del domingo


 en Ciudad de México
guardian.co.uk



Enrique Peña Nieto
Enrique Peña Nieto se encuentra con partidarios del PRI en una manifestación en la Ciudad de México el domingo. Fotografía: Darío López-Mills/AP
Según unos documentos vistos por the Guardian y gente familiarizada con el operativo, una unidad secreta de la cadena de televisión dominante en México, estableció y financió una campaña para que el candidato favorito, Enrique Peña Nieto, ganase las elecciones presidenciales.
Las nuevas revelaciones de la falta de objetividad de Televisa, la cadena de medios más grande del mundo en lengua española, cuestionan la afirmación de ser políticamente imparciales hecha por la compañía así conrique Peña Nieto se encuentra con partidarios del PRI en una manifestación en la Ciudad de México el domingo. Fotografía: Damo las insistencia de Peña Nieto de no haberse beneficiado de una relación especial con Televisa.
La unidad, apodada "el equipo Handcock" lo que según las fuentes era un nombre en código para el político y sus aliados, encargó videos promocionales sobre el candidato y su partido, el PRI, que a la vez que desacreditaban a los rivales del partido en el 2009. Los documentos sugieren que el equipo distribuyó los videos a miles de direcciones de correo electrónico y también los promocionó en Facebook y Youtube donde alguno de ellos todavía puede ser visto.
La naturaleza de la relación entre Peña Nieto y Televisa ha sido un asunto clave de las elecciones que se celebrarán el próximo domingo desde que en Mayo se originara un movimiento estudiantil centrado en la percibida manipulación de la opinión pública a favor del candidato por parte de los medios.
Televisa rehusó hacer ningún tipo de comentario sobre los particulares de los documentos pero negó la idea de que hubiera favorecido al PRI y dijo que hizo trabajo político para todos los grandes partidos.
Los documentos, que consisten en copias escaneadas de contratos firmados así como otras instrucciones y propuestas, sugieren que los subsidiarios de Televisa y ejecutivos nombrados de la misma cadena tomaron parte en el proyecto y pusieron sus conocimientos y a sus empleados a trabajar para Peña Nieto en la fase previa a las cruciales elecciones intermedias al congreso del 2009.
Este material prosigue con la publicación por the Guardian hace tres semanas de un conjunto de documentos del año 2005 que presuntamente detallan la venta por parte de la cadena de cobertura favorable a ciertos políticos entre los que estaba incluido Peña Nieto. Los documentos también parecían contener evidencia de una campaña de desprestigio orquestada desde la empresa en contra de Andrés Manuel López Obrador que en esos momentos estaba preparando su primera campaña presidencial. López Obrador es en estos momentos el rival más próximo de Peña Nieto en la carrera presidencial aunque la mayoría de las encuestas le sitúan a más de 10 puntos por detrás del líder.
Televisa ha rechazado estas acusaciones y las ha tildado de calumnias, ha cuestionado la autenticidad de los documentos y ha exigido una disculpa.
Según fuentes bien informadas, el proyecto "Handcock" (deletreado "Hancock" en algunos documentos) surgió en la fase previa a las elecciones intermedias del 2009.
La clara victoria que el Gobernador Peña Nieto consiguió para el PRI en la región conocida como el Estado de México en esas elecciones ayudó a cimentar su asalto a la candidatura presidencial.

Acuerdos de Confidencialidad

Una fuente declaró a the Guardian que el equipo trabajó en semiclandestinidad dentro de las oficinas de Televisa y que se firmaron acuerdos de confidencialidad y se les urgió a no usar sus direcciones de correo electrónico de Televisa o las direcciones IP de la compañía para distribuir el material.
Una segunda fuente dijo que otras empresas externas contratadas por Televisa para producir videos y otros materiales destinados a la Web también firmaron contratos para asegurar la confidencialidad. Los contratos parecen sugerir que estos "proveedores" eran legalmente responsables de "cualquier tipo de queja individual o colectiva" asociada al mencionado material.
Las fuentes declararon que una de los líderes del equipo fue Alejandra Lagunes, la entonces Directora General de Televisa Interactive Media.
Lagunes abandonó más tarde la compañía y se dedicó a ayudar a ganar las elecciones locales del 2011 al sucesor elegido de Peña Nieto como Gobernador del Estado de México. Actualmente ostenta el puesto de "Coordinadora de la Estrategia Digital y de Redes Sociales" en el equipo de la campaña presidencial de Peña Nieto.
Un portavoz del PRI, Aurelio Nuño, denegó a the Guardian la posibilidad de hablar con Lagunes. Declaró que "la campaña y el candidato Enrique Peña Nieto no tienen conocimiento de la existencia del contrato que the Guardian nos ha enseñado". Y añadió "Enrique Peña Nieto reitera que nunca ha tenido una relación especial con Televisa. Tanto como Gobernador como candidato presidencial, Peña Nieto siempre ha buscado una relación cordial y respetuosa con todos los medios de comunicación".
Una parte principal de la misión del equipo "Handcock", según una fuente, fue la distribución de videos de apoyo a la campaña del PRI mediante el envío masivo de correos electrónicos y la promoción en sitios como Youtube.
Los documentos muestran que al menos algunos de los videos fueron encargados por Televisa a una empresa de producción externa llamada Zares del Universo, de la que en parte era dueño Facundo Gómez, un famoso relacionado con Televisa.
Según uno de los contratos de fecha 1 Mayo del 2009, una subsidiaria participada al 100% por Televisa llamada Comercio Más S.A. De C.V. encargó a Zares la elaboración de una serie de videos cortos, (http://www.guardian.co.uk/world/video/2012/jun/26/mexican-duran-olvera-call) con un coste de 1,722,000 pesos (unos 133,000 USD en esos momentos).
El contrato está firmado por Agustín Lutteroth Echegoyen, Vice Presidente de Televisa y contralor. Su nombre y su firma aparecen también en otros contratos junto con un sello oficial.
En este caso el "cliente" es identificado como "Handcock" para algunos de los videos encargados y en otros como "Televisa Digital". Todavía se puede acceder en Youtube a algunos de ellos. No se especifica el nombre del autor, pero los títulos, los asuntos tratados y la duración exacta son los mismos que los que se recogen en el documento.

El concepto Snoopy

Son una serie de seis videos para una campaña con el misterioso nombre en código Concepto Snoopy.
El contrato especifica que el objetivo es producir "videos que ridiculicen alguno de los errores y puntos débiles del Partido de Acción Nacional" en referencia al PAN de Felipe Calderón. También especifica que los videos no deben de estar firmados.
Gómez declaró a the Guardian: "Hemos hecho mucho trabajo para Televisa pero nunca, por lo que yo sé, hemos producido videos políticos de ningún tipo para Televisa".
Uno de los episodios titulado "la corbata de Enrique Peña" rechaza con desenfado las críticas que el entonces Gobernador recibió por no seguir las sugerencias del Gobierno Federal sobre no llevar corbata durante la epidemia
de peste porcina del 2009. El video contiene una entrevista con el Gobernador en el programa estrella de noticias de la noche de Televisa en la que explica su decisión como un esfuerzo para "no proyectar más la imagen de un país enfermo que ha dañado nuestra economía en gran medida".
Otro de los videos titulado "el malo de Toluca" ataca la trayectoria de un antiguo alcalde de la capital del Estado que se presentaba al puesto de nuevo en las elecciones de 2009. Con los acordes de los Montescos y Capuletos de Prokofiev de fondo, el video repasa una serie de acusaciones como la de "él es el que se divorció de su secretaria y luego la ascendió en su administración".
Otros contratos que han sido mostrados a the Guardian detallan los blogs y las páginas Web para la promoción del PRI que debían crearse por empresas e individuos externos para las subsidiarias de Televisa Comercio Más y Desarrollo Vista Hermosa S.A. de C.V.
Un conjunto de instrucciones a los miembros del equipo les indica que distribuyan un video y lo suban a Facebook y a la red social norteamericana Hi5.
El video, del que no se revela el origen, acusa al alcalde de una ciudad del Estado de usar recursos públicos para hacer campaña por el PAN. El texto del video no hace mención de ninguna filiación política específica y termina con las palabras "envíalo a tus amigos … estoy muy enfadado con esto".
Televisa ha rehusado reunirse con the Guardian para discutir las acusaciones. Primero ignoró nuestra petición sobre sus comentarios al respecto y más tarde propuso una reunión con consejeros legales presentes. Cuando the Guardian envió una lista de ocho preguntas con un pequeño documento de ejemplo adjunto, un portavoz canceló la reunión diciendo que los documentos no se habían enviado en "el momento adecuado".
La cadena añadió que Comercio Más trabajó para todos los grandes partidos. Declaró que "Comercio Más es una pequeña subsidiaria participada al 100% que estaba y está a cargo del portal Esmas y desde 2008 ha estado intentado desarrollar habilidades para la colocación de publicidad online. Comercio Más o Esmas ha hecho presentaciones de su capacidad a entidades públicas y privadas. En cuanto a lo que se refiere a partidos políticos, Comercio Más ha firmado acuerdos con diversos partidos políticos incluyendo los principales partidos del espectro político (PRI, PAN, Movimiento Ciudadano y PRD). Los objetivos de Esmas siempre han sido legales".
"Y lo que es más, después del proceso electoral federal del 2009, el trabajo de Comercio Más y sus ingresos provenientes de partidos políticos fue auditado por la Autoridad Electoral, el IFE, que emitió la resolución GC223/2010. El IFE se mostró satisfecho con la revisión que se llevó a cabo."
Pero César Yáñez portavoz del PDR negó todo conocimiento de Comercio Más o de su portal Esmas. Este portavoz declaró que "Nunca lo he escuchado. No han hecho ningún trabajo para nosotros, ni en esta campaña (presidencial) ni previamente." Si Televisa o el PRI sugirieron otra cosa, añadió, estaban equivocados. "Es completamente falso".
Otra evidencia del trabajo encargado por Televisa para promocionar a Peña Nieto viene de un documento presuntamente enviado por un empleado de la empresa estadounidense Blue State Digital en el que pregunta sobre los pagos pendientes tras la finalización de "diversas tareas para Televisa". La lista adjunta incluye "muchas conferencias telefónicas y reuniones para discutir la estrategia Web para Handcock".

Blue State Digital

Blue State Digital es conocida por haber ayudado a desarrollar la estrategia de Barak Obama en Internet en las elecciones presidenciales de 2008 en los Estados Unidos. Blue State Digital no ha respondido a nuestra petición de hacernos llegar sus comentarios al respecto.
Otro documento, en apariencia enviado por una compañía llamada Producciones Salón a la dirección de Germán Arellano, un empleado de alto nivel de Televisa, tiene por asunto "propuesta edomex", en referencia al acrónimo del Estado de México. Incluye un presupuesto de las páginas Web para el PRI en el Estado así como "el diseño y la implementación de una estrategia integrada que articule la totalidad de los esfuerzos realizados para Handcock".
Los contratos detallan los pagos que se tenían que hacer por las subsidiarias de Televisa a los proveedores externos del material en apoyo de Peña Nieto. Los documentos no aclaran si Televisa pagó las facturas.
The Guardian no ha podido obtener ninguna respuesta de Producciones Salón que no pudo ser localizada ni en la dirección y los números de teléfono incluidos en el contrato ni en las señas incluidas en su página Web.

sábado, 9 de junio de 2012

DOCUMENTOS DEL COMPLOT TELEVISA AMLO

COMPLOT DE TELEVISA VS AMLO




Según unos documentos vistos por the Guardian, la cadena de televisión más grande de México vendió presuntamente a importantes políticos un tratamiento informativo favorable en sus noticieros y shows principales y usó los mismos programas para desacreditar a un líder de izquierda.
Los documentos, que consisten en docenas de archivos informáticos, salen a la luz tan sólo unas semanas antes del Proceso Electoral Federal del 1 de Julio y coinciden con la aparición de un enérgico movimiento de protesta que acusa a Televisa de manipular la forma en la que cubre las noticias para favorecer al candidato favorito Enrique Peña Nieto.
Los documentos que aparentemente fueron creados hace varios años incluyen:
• Un resumen de las cantidades aparentemente cobradas por elevar el perfil de Peña Nieto a escala nacional cuando éste era Gobernador del Estado de México.
• Una estrategia de medios detallada y explícitamente diseñada para torpedear la anterior candidatura a la Presidencia del candidato de izquierda Andres Manuel López Obrador, que es el rival más próximo de Peña Nieto.
• Pagos que sugieren que la oficina del anterior Presidente, Vicente Fox, ocultó unos gastos públicos exorbitantes en promoción publicitaria.
Aunque no ha sido posible confirmar la autenticidad de los documentos, que fueron hechos llegar al Guardian por una fuente que trabajó con Televisa, las referencias cruzadas que se han llevado a cabo en profundidad muestran que los nombres, las fechas y las situaciones mencionadas responden en gran medida a lo sucedido.
También hay evidencia de que tuvieron lugar las acciones que se sugieren en las propuestas. Estas denuncias ocurren en un momento crucial para Peña Nieto, el candidato del Partido Revolucionario Institucional. Los sondeos de opinión más recientes muestran que su clara ventaja está empezando a disminuir al mismo tiempo que el papel de Televisa como hacedor de reyes (políticos) se ha convertido en un asunto central de la campaña.
En un país en el que muy poca gente lee periódicos y el alcance de la Internet y la televisión por cable se encuentra limitado a las clases medias, Televisa y su rival TV Azteca, ejercen una gran influencia sobre la política nacional.
Televisa es el imperio mediático más grande del mundo de habla española y controla cerca de dos tercios de la programación de los canales gratuitos de televisión en México. Los documentos parecen haber sido realizados en Radar Servicios Especializados, una empresa de marketing dirigida por un vicepresidente de Televisa, Alejandro Quintero.

domingo, 13 de mayo de 2012

Peña Nieto: la Imagen Comprada se Deteriora (Primera Parte)


Jenaro Villamil
Reportaje Publicado Originalmente en la Edición No. 1854 de Proceso.
Enrique Peña Nieto durante el debate del pasado 6 de mayo. Fuente: redpolitica.com.mx
En el primer debate televisivo entre los cuatro candidatos presidenciales, Enrique Peña Nieto, el aspirante del PRI-PVEM, lanzó una frase que abrió las compuertas de una nueva polémica sobre sus millonarios contratos para promover su figura y su candidatura en Televisa y TV Azteca, las dos principales empresas de televisión abierta:
“Yo le diría a Andrés Manuel (López Obrador): si la televisión hiciera presidentes, usted sería presidente Andrés Manuel, porque durante su gestión como Jefe de Gobierno destinó más de mil millones de pesos y tengo aquí los documentos de la cuenta pública que representan más del doble de lo que el Estado de México gastó en comunicación social”.
En su réplica, López Obrador le presentó el resumen de 8 cuartillas del Presupuesto 2005-2006, negociado por el gobierno de Peña Nieto y las empresas TV Promo y Radar Servicios Especializados, ambas intermediarias o brokers de Televisa.
Para el primer año de la administración del priista presupuestaron 691 millones 734 mil pesos en tiempos de televisión vía spots (327.4 millones de pesos) y 364.3 millones de pesos en compra de información, incluyendo 180 notas informativas en los noticieros de Televisa.
El proyecto original fue publicado por Proceso en su edición No. 1512, el 23 de octubre de 2005. El presupuesto total ascendía a 724.11 millones de pesos porque incluía 44.4 millones de pesos en “estrategia integral de comunicación” más 10.7 millones de pesos en inserción de 37 publirreportajes en 9 revistas de la empresa Televisa.
Este documento, entregado a Proceso junto con un CD, incluyó 50 páginas de  un detallado Plan de Trabajo 2005-2011 cuyos objetivos principales eran deslindar a Peña Nieto, recién electo gobernador, del “escándalo Arturo Montiel”, su antecesor y padrino político, y convertir a joven mandatario en una figura política, conocida a nivel nacional y “posible candidato” del PRI a la presidencia de la República.
La información fue entregada por una fuente anónima “para proteger mi vida y la de mi familia”. Señalaba a TV Promo, “brazo político y financiero de Televisa” como un instrumento “a través del cual esta empresa vende sus espacios publicitarios, sus contenidos noticiosos e, incluso, su línea editorial a cambio de favores y de retribuciones futuras”.
La misma fuente advirtió en su escrito que Televisa lleva una doble contabilidad a través de TV Promo: “Esta televisora logra maquillar cifras y montos relacionados con los gastos de campaña de sus clientes a fin de evitar que sean sancionados por las autoridades electorales”.
El presupuesto para el primer año de gobierno vino acompañado de una factura a nombre de Radar Servicios Especializados S.A. de C.V. El “cliente” es el Estado de México. Como “responsable del proyecto” aparece Yessica de Lamadrid, que en ese entonces trabajaba para esta empresa.
Tanto TV Promo como Radar Servicios Especializados fueron empresas creadas por Alejandro Quintero, vicepresidente corporativo de Comercialización de Televisa, según consta en los folios No. 293222 del Registro Público de la Propiedad del Distrito Federal.
En 2007 ante la Securities Exchange Commision (SEC), organismo regulador bursátil de Estados Unidos, Televisa admitió finalmente que TV Promo sí realiza intermediación con diversos clientes. Junto con otras empresas bróker “definen tarifas aplicables a terceros que adquieren servicios de publicidad, los cuales son más bajos que las tarifas que regularmente se pagan”. La auditoría de abril de 2008, realizada por Price Waterhouse Coopers anota que durante 2006 y 2007, Televisa “pagó comisiones sobre ventas a una empresa en donde un miembro del Consejo y ejecutivo de la compañía es un accionista por un monto de 113 millones 972 mil pesos y 49 millones 614 mil pesos, respectivamente”.
En el debate presidencial, Peña Nieto le respondió a López Obrador que esa información era “totalmente falsa” y  provenía “de una revista que de manera especulativa” la ha publicado. Nunca mencionó a Proceso por su nombre. Mucho menos admitió que existiera una intermediación a través de Alejandro Quintero.
La Danza de las Cifras
La oficina de prensa del PRI distribuyó, apenas terminó el debate, cifras con los montos que el Estado de México destinó de 2005 a 2011 al Comunicación Social durante la administración de Peña Nieto: 646 millones de pesos. Era apenas un recuadro. Citaban a Fundar y Artículo 19, especializadas en acceso a la información y transparencia que, a su vez, citaban las fuentes oficiales mexiquenses. Es decir, se autocitaron utilizando a un tercer organismo.
La información proporcionada por el PRI no desglosaba la inversión en televisión abierta y menos mostraba los contratos originales. Desde finales del gobierno de Arturo Montiel, la oficina de Comunicación Social calificó como “reservada” la información de los contratos con medios de comunicación, tanto impresos como electrónicos. La administración de Peña Nieto continuó manteniendo en “reserva” esa información.
En contraste, el PRI informó también que durante la administración de Andrés Manuel López Obrador y Alejandro Encinas (2000-2006), el Gobierno del Distrito Federal gastó 1,209 millones de pesos en Comunicación Social. Según el equipo peñista, el gasto per cápita anual de la administración capitalina en ese periodo fue de 23 pesos, mientras el gobierno peñista destinó sólo 7 pesos per cápita.
También citó a Fundar para indicar que el gobierno federal invirtió de 2005 a 2011 un total de 16, 566 millones de pesos en comunicación social, “25 veces más que el Estado de México”.
Los primeros días posteriores al debate, la polémica por los gastos de Comunicación Social del Estado de México, el Gobierno del Distrito Federal y el gobierno federal quedaron en segundo plano. El distractor más importante fue la polémica presencia de la edecán Julia Orayén, quien llevó un vestido escotado que generó fervor en las redes sociales y las fallas en la producción televisiva del debate, atribuidas a Jesús Tapia, quien terminó presentando su renuncia ante el IFE.
Sin embargo, la polémica adquirió  un nuevo aire el 9 de mayo. López Obrador desmintió las cifras del gasto de Comunicación Social de su gobierno ofrecidas por Peña Nieto. Según el candidato presidencial del PRD, sus gastos fueron de la siguiente manera: 148 millones de pesos en el 2001, 149 mdp en el 2002; 72.9 mdp en el 2003; 92.9 mdp en el 2004; y 93.3 mdp en el 2005. Un total de 557 millones de pesos.
El periódico Reforma publicó un comparativo con estas cifras y los datos de la Cuenta Pública de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. No coincidieron las cifras del 2001 y 2002. En el primer año fueron 2002.6 mdp, y en el segundo fueron 212.7 mdp. El monto total es de 674 millones de pesos, 119 millones de pesos de diferencia.
Las cifras del Gobierno del Estado de México son más contrastantes. Según el monto de la información difundida en la página oficial de Enrique Peña Nieto, su administración destinó un total de 646.6 millones de pesos entre 2005 y 2011. Según la cifra derivada de la Cuenta Pública se destinó a Comunicación Social un total de 1 mil millones de pesos. Es decir, 354 millones de pesos de diferencia.
En entrevista con Carmen Aristegui, en el programa MVSNoticias, López Obrador le planteó el 10 de mayo un desafío a Enrique Peña Nieto:
“Si es cierto lo que él dice (Peña Nieto) en el manejo de los gastos en medios, yo renuncio a mi candidatura, pero si no es cierto lo que él dice, que haga lo propio”.
Y planteó la necesidad de contrastar las cifras y las pautas publicitarias con las televisoras y el monitoreo de ambos periodos.
El viernes 11 de mayo, Peña Nieto defendió las cifras de gasto en Comunicación Social de su gobierno, insistió que entre 2001 y 2006, el GDF destinó 1,209 millones de pesos en este rubro y evadió aceptar el reto de López Obrador. “El puso esa condición. Nadie le pide que renuncie a su candidatura”, atajó el mexiquense en entrevista con Aristegui.
Volvió a desacreditar el extenso plan de acción que Televisa le ofreció a Peña Nieto desde octubre de 2005, publicado por Proceso por un monto total de 742.1 millones de pesos, de los cuales, 691.7 millones serían en “inversión en tiempos de televisión”.
“Es un documento no nuevo. Es un documento publicado hace cinco o seis años por una revista (sic) y que no tiene fundamento ni sustento alguno. No es información oficial ni está sustentado, menos avalado por información pública del gobierno. No sé de la empresa televisiva, pero del gobierno evidentemente no tiene sustento alguno”, insistió Peña Nieto.
Peña Nieto sí aceptó que su gobierno destinó al menos 32.3 millones de pesos en “apoyos informativos” para programas radiofónicos, además de 19.7 millones de pesos en spots de radios como parte de sus campañas informativas. Los “apoyos informativos” incluyeron el pago de 9.2 millones de pesos a la empresa ASTRON Publicidad S.A., por “comentarios de Joaquín López Dóriga transmitidos dentro de su noticiero ‘López Dóriga’ y en el noticiero de Oscar Mario Beteta”.
El candidato presidencial priista se justificó diciendo que era pago para patrocinar el segmento, no para que hablaran bien de su persona. Es “como el comercial de Tequila Don Ramón”, afirmó Peña Nieto. “No es algo nuevo. Esos documentos son de 3 años”, minimizó.
La misma empresa ASTRON Publicidad cobró varios de estos servicios a otros gobiernos estatales. Por ejemplo, el 15 de enero de 2008, el gobierno de Nuevo León le pagó 575 mil pesos por comentarios favorables al mandatario estatal priista.
Peña Nieto negó que dependiera de Televisa o que pagara para que en los espacios informativos de la empresa hablaran bien de él. Calificó como “absurdo y falaz” que Televisa hiciera una inversión política a través de él. (Continuará)