Así se presenta este documental sobre el sistema de educación norteamericano dirigido por Davis Guggenheim, quien ya conocieramos por An Inconvenient Truth (2006). Este documental se estrenó en Octubre en USA en algunas salas limitadas y desde que ganara en Sundance como premio de la Audiencia y se le nominara para el gran premio del jurado, ha levantado comentarios diversos que parecen calentar el ambiente para su estreno aunque no para ayudar a un verdadero debate.
Siendo el tema la educación, aun cuando muchos han criticado del documental que sea demasiado apocalíptico en su visión y que tomara en cuenta una cierta fracción de la sociedad más sufrida como material del mismo, dejando de lado otros ingredientes que de haberse aportado podrían colaborar en el debate sobre una verdadera necesidad de reforma del sistema educativo, indudablemente refleja solo la verdad.
Sinópsis: Para una nación que declaró con orgullo que "no dejaría a ningún niño atrás", Estados Unidos sigue haciéndolo de un modo alarmante.
A pesar del aumento en el gasto público y las promesas de los políticos, el desvencijado sistema de educación pública estadounidense, que alguna vez fue el mejor del mundo, deja a la deriva rutinariamente la formación de millones de niños. El cineasta Davis Guggenheim nos recuerda que las estadísticas de educación tienen nombre: Anthony, Francisco, Bianca, Daisy y Emily; los niños cuyas historias componen Waiting for Superman.
Guggenheim sigue de cerca a un puñado de niños prometedores a través de un sistema que inhibe, en lugar de promover, el desarrollo académico. Este documental hace un examen exhaustivo de la educación pública inspeccionando "fábricas de desertores escolares" y "sumideros académicos", diseccionando metódicamente "el sistema" y sus problemas aparentemente enmarañados. O sea que, "en todas partes se cuecen habas".
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