Marcada por el silencio, con los pies cansados y portando fotos de los muertos, la marcha por la paz que encabeza en México el poeta Javier Sicilia llegó hoy a la entrada de la capital, en la segunda jornada de una caminata de 90 kilómetros que culminará el domingo en el corazón de la ciudad.
Desde temprano, los alrededor de 1.000 participantes partieron de la comunidad de Coajumulco y avanzaron a pie por la carretera que une Cuernavaca con la capital mexicana. Recibieron aplausos, agua, naranjas y muestras de apoyo en el camino, reseñó DPA.
Llevan el reclamo silencioso de un cambio de estrategia en la lucha contra el crimen organizado, que ha causado unas 40.000 muertes en los últimos cuatro años.
"No se trata de frenar la batalla contra el narcotráfico, se trata de replantear la estrategia. No estamos en contra de la persecución de la delincuencia, pero el problema del narcotráfico habría que repensarlo", dijo Sicilia antes de empezar hoy la caminata.
Representantes del grupo Los 8 Pueblos de Tepolejo recibieron la marcha silenciosa al llegar a la zona limítrofe entre el estado de Morelos y Distrito Federal.
Este jueves la caravana recorrió 20 kilómetros y hoy completará unos 30 en su acercamiento a la Plaza del Zócalo, la principal de Ciudad de México, en la que confluirán organizaciones y ciudadanos de distintas partes del país. Además, habrá actos solidarios en 35 ciudades de México y unas 25 del extranjero.
Cerca del kilómetro 47 de la autopista Cuernavaca-México, el contingente que encabeza el poeta Javier Sicilia recibió el abrazo de los representantes de comunidades que colindan con el municipio de Huitzilac para darles la bienvenida a la capital del país.
Los participantes, entre religiosos, estudiantes, grupos civiles y familiares de víctimas de la violencia, han hecho tres pausas para tomar fuerzas, hidratarse y probar un poco de alimento antes de llegar a Topilejo, su segundo destino.
La caravana sigue su paso por los cerros que unen a la capital del país con Morelos. Ha pasado por pendientes prolongadas y soportado el frío que se registra esta zona por su altura.
La movilización, con algunos tramos a pie y otros en vehículos en zonas de curvas o pendientes peligrosas, fue convocada por el poeta y articulista Sicilia después de que su hijo Juan Francisco, de 24 años, apareciera asesinado por asfixia el 28 de marzo con otros seis jóvenes en Cuernavaca.
"Nadie está pidiendo que le demos la espalda a la lucha contra el crimen, por supuesto que no", indicó el poeta, en respuesta a un mensaje emitido por la noche por la Presidencia, el segundo consecutivo del presidente Felipe Calderón en coincidencia con la marcha.
En ese mensaje, el gobierno expresó el "respeto" de Calderón por la marcha, pero reiteró que el enemigo de los mexicanos "es el crimen organizado.
"El primer mandatario reitera que el gobierno federal es sensible a los ciudadanos y a su exigencia de tener un México sin violencia, por lo que las acciones de las fuerzas de seguridad están encaminadas a proteger a los ciudadanos y lograr el objetivo de tener un México de paz y justicia", dice el texto del gobierno.
Sicilia afirmó que no se puede pensar que la seguridad es nada más "el Ejército en las calles con un marco legal", sino que deben generarse empleos, mejor educación, romper complicidades oscuras en las instituciones y volver a la ética.
"Nadie está diciendo que no hay que combatir también con las armas, por desgracia, pero no es la única salida", expresó.
En esta segunda fase, la caravana avanzó por el carril de baja velocidad de la carretera hasta Topilejo, ya en Ciudad de México, donde pernoctarán, antes de continuar el sábado hasta Ciudad Universitaria, previo al gran acto del domingo.
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