Rima bint Abdul Rahman al-Jareesh y Sharifa al-Saqaabi se encuentran recluidas en la prisión de Al Qassim, en la localidad deBuraidah, situada al norte de la capital, Riad, pero no se sabe si tienen acceso a sus abogados y sus familias. Si se hallan recluidas en régimen de incomunicación, corren riesgo de sufrir tortura u otros malos tratos. Formaban parte de un grupo de manifestantes, integrado por unas 25 mujeres, 15 hombres y 6 niños, que pedían el juicio justo y público de familiares suyos que llevan años recluidos sin cargos ni juicio. La manifestación, iniciada, al parecer, el 3 de julio a las cuatro de la tarde, duró alrededor de hora y media, hasta que funcionarios del Ministerio convencieron a los participantes de que se habían escuchado sus mensajes y les dijeron que se fueran. Rima bint Abdul Rahman al-Jareesh y Sharifa al-Saqaabi fueron detenidas por las fuerzas de seguridad cuando se marchaban de allí, junto con alrededor de 13 mujeres más y 5 niños, que según los informes quedaron en libertad tras firmar un documento en el que se comprometían a no volver a manifestarse.
Ambas habían firmado anteriormente peticiones en demanda de reformas en el país. Se cree que Rima bint Abdul Rahman al-Jareesh se ha negado a firmar el compromiso de no volver a manifestarse y a que su mahram (tutor masculino) haga de fiador suyo para que la dejen en libertad. Es miembro de la Asociación Saudí de Derechos Civiles y Políticos y había sido detenida ya anteriormente, el 19 de julio de 2007, por participar en una manifestación similar el día anterior. En esa ocasión quedó en libertad a los tres días.
En Arabia Saudí, quienes critican al gobierno están expuestos a sufrir graves violaciones de derechos humanos a manos de las fuerzas de seguridad bajo el control del Ministerio del Interior. A menudo son recluidos en régimen de incomunicación, sin cargos ni juicio, o, a veces, en régimen de aislamiento, y se les impide consultar a abogados y acceder a los tribunales para impugnar la legalidad de su detención. Con frecuencia se utilizan la tortura u otros malos tratos para obtener confesiones de los detenidos, castigarlos por negarse a "arrepentirse" u obligarlos a comprometerse a no criticar al gobierno.
ESCRIBAN INMEDIATAMENTE, en árabe, en inglés o en su propio idioma:
- Instando a las autoridades a que garanticen que Rima bint Abdul Rahman al-Jareesh y Sharifa al-Saqaabi, detenidas tras una manifestación organizada en Riad el 3 de julio, están protegidas contra la tortura y otros malos tratos y tienen acceso de manera habitual a sus abogados, sus familias y los servicios médicos que puedan necesitar.
- Pidiendo que sean puestas en libertad de inmediato y sin condiciones si se hallan recluidas únicamente por el ejercicio pacífico de su derecho a la libertad de expresión y asociación y son, por tanto, presas de conciencia.
- Pidiendo que se hagan públicos los cargos que puedan haberse presentado contra ellas y se garantice que los procedimientos judiciales a que sean sometidas se ajustan a las normas internacionales sobre juicios justos.
ENVÍEN LOS LLAMAMIENTOS, ANTES DEL 15 DE AGOSTO DE 2011, A:
Viceprimer ministro segundo y ministro del Interior
Second Deputy Prime Minister and Minister of the Interior
His Royal Highness Prince Naif bin Abdul Aziz Al-Saud, Ministry of the Interior, P.O. Box 2933, Airport Road
Riyadh 11134
Arabia Saudí
Fax: +966 1 403 3125 (insistan)
Tratamiento: Your Royal Highness / Alteza
Rey
His Majesty King Abdullah Bin Abdul Aziz Al-Saud
The Custodian of the two Holy Mosques
Office of His Majesty the King
Royal Court, Riyadh
Arabia Saudí
Fax: (vía el Ministerio del Interior)
+966 1 403 3125 (insistan)
Tratamiento: Your Majesty / Majestad
Copia a:
Presidente de la Comisión de Derechos Humanos
President, Human Rights Commission
Bandar Mohammed Abdullah al-Aiban
Human Rights Commission
P.O. Box 58889, King Fahad Road, Building No. 373, Riyadh 11515
Arabia Saudí
Correo-e: hrc@haq-ksa.org
Envíen también copias a la representación diplomática acreditada en su país.
S.A.R. Príncipe Saud Bin NAIF bin ABDULAZIZ AL-SAUD
Embajador Extraordinario y
Plenipotenciario
Doctor Alvarez Sierra, 3 28033 - MADRID
Teléfono: 91 383 43 00 y 91 383 22 29 - Fax: 91 302 11 45
Sección Consular: Fax: 91 766 73 38
E-mail: info@arabiasaudi.org
www.arabiasaudi.org
Inserten a continuación las correspondientes direcciones:
Nombre Dirección 1 Dirección 2 Dirección 3Fax Numero de fax Correo-e Dirección de correo-e Tratamiento Tratamiento
Consulten con la oficina de su Sección si van a enviar los llamamientos después de la fecha anteriormente indicada.
INFORMACIÓN COMPLEMENTARIA
Las autoridades saudíes no toleran, en general, las manifestaciones. Quienes intentan organizarlas o participar en ellas suelen ser recluidos en régimen de incomunicación, sin cargos y sin acceso a un tribunal ante el que impugnar la legalidad de su detención.
Según informes, tras una manifestación contra la ofensiva militar israelí de la Franja de Gaza lanzada el 27 de diciembre de 2008, un portavoz del Ministerio del Interior hizo el 30 de diciembre de ese año el anuncio explícito de que las manifestaciones estaban prohibidas en Arabia Saudí. Tras manifestaciones celebradas a comienzos de marzo de 2011 en Al Qatif (véase AU 61/11, de 7 de marzo de 2011, MDE 23/005/2011) y en medio de informes sobre la convocatoria de nuevas manifestaciones para pedir reformas en Arabia Saudí, el Ministerio del Interior emitió el 5 de marzo una declaración en la que confirmaba la prohibición de las manifestaciones en el país. Según esa declaración, las fuerzas de seguridad tomarían "todas las medidas necesarias" contra quienes intentaran alterar el orden.
En Arabia Saudí, quienes critican al gobierno están expuestos a sufrir graves violaciones de derechos humanos a manos de las fuerzas de seguridad bajo el control del Ministerio del Interior. A menudo son recluidos en régimen de incomunicación, sin cargos ni juicio, o, a veces, en régimen de aislamiento, y se les impide consultar a abogados y acceder a los tribunales para impugnar la legalidad de su detención. Con frecuencia se utilizan la tortura u otros malos tratos para obtener confesiones de los detenidos, castigarlos por negarse a "arrepentirse" u obligarlos a comprometerse a no criticar al gobierno. La detención en régimen de incomunicación suele durar hasta que se obtiene una confesión, lo que puede suponer meses y, en ocasiones, años.
Arabia Saudí es Estado Parte en la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, que prohíbe el uso de pruebas obtenidas mediante tortura u otros malos tratos. Su artículo 15 dispone: "Todo Estado Parte se asegurará de que ninguna declaración que se demuestre que ha sido hecha como resultado de tortura pueda ser invocada como prueba en ningún procedimiento, salvo en contra de una persona acusada de tortura como prueba de que se ha formulado la declaración".
Desde el 11 de septiembre de 2001 han sido detenidas arbitrariamente en Arabia Saudí millares de personas, incluidos detractores pacíficos de Estado y activistas de los derechos humanos. Por ejemplo, al menos siete hombres fueron detenidos en febrero de 2007 en las ciudades de Yidda y Mediana, tras haber difundido una petición en demanda de reformas políticas y entablado debates sobre una propuesta de establecimiento de una organización independiente de derechos humanos en Arabia Saudí. Entre los que continúan detenidos figuran el Dr. Saud al-Hashimi, Al-Sharif Saif al-Ghalib, el Dr. Musa al-Qirni, el Dr. Abdel Rahman al-Shumayri, Fahd al-Qirshi y Abdel Rahman Khan. También denunciaban la impunidad de que disfrutan los funcionarios del Ministerio del Interior que practican detenciones y ordenan la reclusión de los detenidos. El Ministerio del Interior ha afirmado en una declaración que fueron detenidos por recaudar dinero para el apoyar el terrorismo, algo que ellos niegan. Entre los participantes en la manifestación del 20 de marzo de 2011 había familiares de estos hombres.
Mohammad Salih al-Bajadi, uno de los fundadores de la Asociación Saudí de Derechos Civiles y Políticos, que había asistido a la manifestación del 20 de marzo para pedir el juicio o la liberación de todas las personas detenidas sin cargos ni juicio, fue detenido en su casa al día siguiente y se encuentra recluido desde entonces (véase DETENIDO TRAS MANIFESTACIÓN ACTIVISTA DE LOS DERECHOS HUMANOS, 25 de marzo de 2011, AU 91/11, Índice: MDE 23/009/2011).
Para más información, véase el informe de Amnistía Internacional Arabia Saudí: Ataque a los derechos humanos en nombre del antiterrorismo, publicado el 22 de julio de 2009 (http://www.amnesty.org/en/library/asset/MDE23/009/2009/en/3ea67a24-7946-4207-ab7d-5cb72d2293fe/mde230092009spa.pdf), y su actualización, Arabia Saudí: Medidas represivas en nombre del antiterrorismo, 11 de septiembre de 2009( http://www.amnesty.org/en/library/info/MDE23/025/2009/en)
Nombre: Rima bint Abdul Rahman al-Jareesh (m) y Sharifa al-Saqaabi (m)
Si recibe contestación de una autoridad, envíenos el original o una copia, por favor, lo antes posible (ref.: "Equipo AAUU - Respuesta"). Sólo es necesario que indique en el reverso de la misma el número que tiene la Acción Urgente a la que le han contestado (por ejemplo "AU 25/99" o bien "EXTRA 84/99"). No es necesario que nos envíe copia de su propia carta. Si no desea que le enviemos un acuse de recibo, indíquenoslo también en el dorso con las palabras "No acuse". Gracias por su colaboración.
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