La Paz, BCS.- Las horas posteriores a dejar la Gubernatura de Coahuila fueron terribles para Humberto Moreira Valdés, pero a la vuelta de los días está más tranquilo, seguro de que en su relevo el Congreso Estatal designó a “un gran servidor público”.
Tras dejar de manera anticipada el cargo en un intento por convertirse en líder nacional del PRI, viajó a la Ciudad de México y se instaló en un hotel junto a sus más cercanos colaboradores.
“Los primeros días fueron muy difíciles para mí. La primer noche allá en México estábamos todos agüitados y les dije: ‘a ver, no esperen que el muerto se levante a consolar a los deudos, así es que debemos levantar la cara y salir adelante’”.
Recordó que, aunque difícil, la decisión de salir de la Gubernatura era necesaria considerando “la necesidad de fortalecer un proyecto político que permita un cambio de régimen” en el Gobierno federal.
“Fue una decisión personal dejar aquello y buscar esto, pero la primera noche después dejar el estado fue realmente difícil para mí, y si le agregas que fui a caer a un hotel y que el cuarto era muy frío, y si le agregas que la dinámica era muy tensionante porque había que tener cuidado de que nada se saliera de control para que fuera yo presidente del partido y lograr la unidad.
“Si le agregas que me fui del estado de una manera muy rápida porque este proyecto se construyó en muy poco tiempo, fueron muy difíciles los días, pero al paso del tiempo se asimila más porque la dinámica de trabajo que traigo es muy intensa, no dejas de pensar en el estado, pero lo supera, aunque al principio fue lo más difícil que te puedas imaginar, fue la nostalgia por la obra pública que se hizo, por la gente, el estar viendo a mis hijos, a mi esposa y de repente no ver a nadie, está canijo”.
-¿Es un asunto que también tiene que ver con las lealtades?
“Sí. Las lealtades de los amigos y de los principios. ¿Qué me da tranquilidad?, que Jorge Torres es un gran Gobernador, es un gran servidor público y eso hace que como coahuilense pueda estar tranquilo al saber que el Gobierno no pudo haber quedado en mejores manos que en las de Jorge Torres”.
-¿Qué lugar ocupa su familia en este momento de su vida y de su trayectoria política?
“Tenemos comunicación constante, con mensajes y llamadas a diario con mis hijos y con mi esposa, sobre todo ahora que estamos esperando familia de nuevo, algo que, por cierto, lo dijo el Zócalo antes que nadie. Tenemos siete semanas de embarazo y estar lejos de ellos se siente y se resiente.
-Fanático de la cocina tradicional saltillense, el ex mandatario también padece los efectos de la dieta.
“Trabajo muchas horas y llego rendido, duermo muy poco, he bajado de peso porque las comidas no las hago a mis horarios, luego como poco porque extraño las tortillas de harina y las gorditas de La Penumbra, la comida de mi tierra, pero al fin me salí de un hotel, me fui a un departamentito allá en México y ahí me podré hacer mis huevos con salsa, en fin, se va a normalizar mi alimentación”.
-¿Cómo ve a Coahuila en perspectiva?
“Todas las noches me duermo pensando en Coahuila y me despierto pensando en Coahuila. Dicen que a la tierra de uno se le debe querer como a la novia, yo digo que quiero a Coahuila como a una madre. Se debe venerar a todo el estado, tengo gran recuerdo de Coahuila, gran nostalgia, y lo de ser coahuilense me lo dicen en todo el país, Coahuila es una referencia en mí y tengo gran recuerdo de nuestro estado”.
Sin embargo, el alejamiento de su tierra le permite valorar el desempeño que tuvo como gobernador y destacar “todo lo que hicimos”, a diferencia de la situación de muchos otros estados del país en materia de infraestructura.
“Recorriendo el país me doy cuenta de lo que hicimos en Coahuila porque no hay obra pública en muchos estados, no se tapan ni los baches y en Coahuila hay una gran transformación”.
-¿Son entidades gobernadas por algún partido político en específico?
“Hay de todo, pero desafortunadamente el principal deterioro radica en lugares que gobierna el Partido de la Revolución Democrática, como éste; en Baja California Sur hace 12 años llegó el PRD y se apropió del Gobierno estatal, pero hay comunidades con un desarrollo precario, incluso más deterioradas que cuando la Baja Sur era territorio”.
-¿Pero esto no tiene que ver con una estrategia del Gobierno federal, del PAN, para asfixiar presupuestalmente a los gobiernos de oposición?
“Sí. Hay una estrategia montada en este sentido, pero también está el ejemplo de nosotros, de Coahuila, donde no obstante al trato injusto y hasta inhumano que recibimos de las administraciones panistas en el Gobierno federal, hemos logrado salir adelante, hay obra pública, el desarrollo es incuestionable, se ha elevado de manera clara el nivel de vida de la población”.
-¿Esto lo hace añorar más el terruño?
-Sí, pero a extrañar lo bueno también nos tenemos que acostumbrar, lo positivo de todo es que a donde voy, donde me pare, me identifican por la transformación que logramos en este gobierno en Coahuila y también porque siempre tuvimos la frente en alto y los argumentos necesarios para defender con firmeza los intereses de los coahuilenses. Me da gusto saber que, de punta a punta, a lo largo y ancho de todo el país, el nombre de Coahuila se encuentra en alto”.
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